La falta de medicamentos en Cuba es otra de las consecuencias más visibles de la agudización de la crisis económica que vive la Isla.
Según la prensa oficial cubana, al cierre de junio de 2019 faltaban en la Isla 47 medicamentos, de acuerdo con funcionarios de la industria farmacéutica, que aseguraron además que en los meses de julio y agosto, la tendencia se mantendría entre los 40 y 44 medicamentos en falta.
Sin embargo, a principios de agosto el administrador de una farmacia del municipio Playa que solicitó anonimato, dijo a una colaboradora de ADN CUBA que serían muchos más (“como 250”) los productos ausentes en las farmacias.
“Problemas con la materia prima. Es lo que nos informan, y es lo que decimos a la gente, que nos reclaman a nosotros como si fuéramos los culpables”, comentó entonces el administrador.
Directivos del Grupo de las Industrias Biotecnológicas y Farmacéuticas de Cuba (BioCubaFarma) aseguran que la tendencia es “a la disminución de las faltas, luego de la compleja situación enfrentada por la industria en el primer cuatrimestre de este año, que impactó considerablemente a la población”.
BioCubaFarma se encarga de suministrar el 77% de los medicamentos que llegan a las farmacias cubanas.
“Existen problemas y por eso trabajamos día a día para estabilizar la situación. Se trata de productos muy sensibles para la salud de las personas”, dijo a la prensa oficial Rita María García, directora de Operaciones y Tecnología de esa entidad.
“Problemas bancarios” y “afectaciones de materias primas por diferentes causas relacionadas con los proveedores”, fueron mencionados como los principales culpables del déficit.
La funcionaria reconoció la delicada situación de los medicamentos en Cuba, aunque con el acostumbrado espíritu triunfalista que promete mejorías paulatinas, que, sin embargo, no son percibidas por la población.
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Los reportes oficiales revelan la ausencia de más de 10 medicamentos “controlados” a través del llamado “tarjetón”, que resultan vitales para muchos cubanos.
Adultos mayores entrevistados por ADN CUBA en la ciudad Santa Clara, se quejaron de la ausencia de medicinas, y criticaron también que “las revenden”, un fenómeno cuyo origen no es otro que el desabastecimiento.
Recientemente Nancy González, una cubana residente en Estados Unidos fue arrestada junto a su esposo y multada tras intentar entrar a un hospital de Cienfuegos con productos médicos necesarios para el tratamiento de sus seres queridos.
“Los hospitales no cuentan con personal médico suficiente ni con los insumos necesarios para cada caso por lo que mandan las personas a sus casas a morir sin supervisión apropiada”, escribió González en una denuncia que se viralizó en redes sociales.
Además de la idignación que causó el arresto en sí, muchos usuarios opinaron que el gobierno y las instituciones cubanas deberían adoptar políticas que favorezcan las donaciones y la importación de productos e implementos médicos ante la crisis actual.
A finales de julio, el preso político cubano Silverio Portal Contreras denunció la falta de medicamentos que afecta a los reclusos en la prisión de Valle Grande.
A través de una carta a la que tuvo acceso ADN CUBA— y que está dirigida a los Órganos de la Seguridad del Estado— Portales aseguró que le han pedido a los reclusos que “se suministren sus propios medicamentos, ya que la prisión no se los puede proveer”.