Los residentes del poblado Santa Mónica del municipio de Quivicán en Mayabeque se quejan de que los apagones allí son constantes y de larga duración. En el presente mes, en pleno verano, han sufrido apagones de más de 12 horas por coincidencias entre fallas en el sistema y vía libre.
El diario oficialista Juventud Rebelde publicó el sábado pasado que un habitante de esa comunidad comunicó su malestar por la frecuencia de la falta de luz. Juan G. Baisre Álvarez, quien vive en el edificio C, apto. 35 dijo al diario que la corriente se va muy a menudo y lo calificó como un “quita y pon” y provoca el descontento de quienes moran allí.
La respuesta de los directivos de la Empresa Eléctrica no convence a este cubano: “Nos explican que es debido a un mecanismo que se dispara por cualquier problema: lluvia fuerte, gajos de árboles o simplemente una rana, afirma. Pero lo fundamental es que quitan la electricidad con demasiada frecuencia; y cada vez que se necesita una vía libre estamos incluidos en ella”.
Además, cualquier reparación en el poblado requiere llegar a él a través de vías en mal estado que perjudican el acceso a la comunidad.
Esta no es la primera queja sobre la Empresa Eléctrica que se ventila en la columna Acuse de Recibo del medio oficial, a inicios de mayo esta entidad fue fuertemente criticada por no satisfacer las demandas de la población y por mantener una pésima gestión durante la crisis del coronavirus.
En abril pasado varios usuarios reportaron en las redes sociales que los cortes eléctricos estaban siendo reiterativos en medio de la propagación del coronavirus. Los apagones recuerdan los perores tiempos del periodo especial, que al parecer nunca ha terminado solo que ha mutado sus circunstancias y el nombre.
En ese momento el periodista José Raúl Gallego decía en un tuit “Apagones y coronavirus no son una buena combinación. Los alimentos se pudren por descongelamiento; el calor insoportable hace que la gente salga de la casa; la oscuridad se presta para actos vandálicos. Ojo con esto”.
Los apagones son algo frecuente en la Cuba “revolucionaria”. En junio la prensa estatal lanzaba mensajes para el ahorro de electricidad o de lo contrario el flujo de corriente eléctrica se vería afectado en el país. Aunque suene increíble e Cuba es más que común que durante uno de los meses más calurosos del año las familias cubanas tengo que sufrir escasez y falta de luz.