Los vecinos de la Habana Vieja también necesitarán “tarjetas de identificación” para comprar en las tiendas de su municipio, como sucede desde esta semana en Centro Habana.
Un periódico oficialista informó que hasta la parte antigua de la urbe “se extiende el experimento de las tarjetas de identificación de Centro Habana, por núcleo familiar, válida solo para residentes en el municipio”.
Este martes en la noche, el medio oficial Tribuna de La Habana anunció que ese municipio está entre aquellos donde “se pretende incrementar las medidas de aislamiento social” por la pandemia del coronavirus, algo muy parecido a una cuarentena, palabra evitada por las autoridades y sus medios voceros.
Según el régimen, este documento, otorgado también a los residentes que no tengan libreta de abastecimiento en el lugar, será imprescindible para hacer compras en cadenas de tiendas, puntos de ventas fijos y móviles de la corporación Cimex S.A., tiendas TRD, Caracol y Palmares de la Habana Vieja.
“Debido a la complejidad y vulnerabilidad de este territorio, y su proximidad a Centro Habana, aislado desde la pasada semana”, se decidió arreciar las medidas de aislamiento social e implementar otras, como la entrega de tarjetas de identificación.
El gobierno local pretende repartir la tarjeta entre los habitantes de la Habana Vieja durante “las próximas 72 horas”. Para evitar falsificaciones el documento “tendrá otra imagen, las letras serán de color rojo y contendrá cuños y folios”, informó la prensa estatal.
La Habana Vieja tiene una población de más de 20 mil habitantes, y según fuentes oficiales “más de 30 casos positivos de la COVID-19 y más de 900 personas entre confirmados, sospechosos y contactos”.
Esta semana comenzó la entrega de “tarjetas de identificación” que permiten solo a los residentes de los municipios seleccionados comprar en tiendas, mercados y farmacias de la zona.
El martes 12 de mayo, se informó que “la entrega de tarjetas de identificación para los habitantes de Centro Habana marcha a buen ritmo, e incluye a aquellos que residen en el municipio, pero no poseen dirección particular allí”.
Además, las autoridades continúan “pidiendo acudir al médico ante cualquier síntoma”.
A cada familia le correspondería una tarjeta que los señala como residentes de Centro Habana o la Habana Vieja, una confirmación con la que podrán “comprar en los diferentes mercados, tiendas, farmacias y centros de comercio”, según Cubadebate.
La medida está dirigida a evitar las enormes aglomeraciones para adquirir alimentos, y limitar que, ante el desabastecimiento general, otros habaneros busquen en esos populosos barrios -donde hay más establecimientos comerciales- los pocos suministros que vende el Estado.
Cubadebate explicó que el viernes pasado que “las tarjetas deben distribuirse mediante la red de bodegas [estatales], es válida solo para los residentes del municipio, su portador debe ser mayor de edad, su pérdida no se repone, su reproducción se considera un acto ilegal y cuenta con cuños y folio”.
Sobre Centro Habana, Luis Antonio Torres Iríbar, secretario del Partido Comunista en La Habana, comentó que “a diferencia de otros lugares donde se han aplicado medidas restrictivas (…) cuenta con una infraestructura comercial y de servicios preexistente, que facilita el cumplimiento de las medidas”.
Contradictoriamente, ha sido la falta de alimentos y otros suministros en la ciudad, del que no escapa esta zona y su vecina Habana Vieja, lo que ha provocado que se generan interminables colas de personas intentando adquirir los insumos necesarios para subsistir en medio de la propagación del coronavirus.