Una tras otra, se suman nuevas zonas en cuarentena en toda Cuba. La pandemia avanza en un reto continuo a las medidas aprobadas por el régimen, que no logra disminuir los casos en provincias como Ciego de Ávila, Matanzas y La Habana.
En Güines, municipio de Mayabeque, se acordó poner en aislamiento la zona del Reparto desde la calle 112 hasta 126 incluyendo las avenidas 71, 73 y 77 desde el pasado sábado. Está área incluye las circunscripciones 13, 14 y 15.
Para que los pobladores tengan algo de comer, el gobierno local colocó puestos de venta, puntos de las TRD y de panaderías en las esquinas y zonas cercanas al lugar. Además, hay doctores y enfermeras apostadas permanentemente en los alrededores, agregó el diario Mayabequense.
Hay presencia permanente del Ministerio del Interior y el Ejército cerca de los cordones que cercan las manzanas, como advertencia de lo que podría pasar a quien viole la estricta cuarentena decretada por el régimen.
Sin embargo, no es la única área bajo el mismo régimen en Cuba. El hospital Camilo Cienfuegos, de Sancti Spíritus, está en aislamiento luego de que trabajadores de dicho centro se contagiaran con la COVID-19.
En la provincia solo permanecen activos dos eventos de trasmisión: uno en Trinidad y el otro en la comunidad de Bernal, en Jatibonico, donde ya se han estudiado la mayoría de las personas involucradas en ellos. No obstante, tres controles de foco se hallan abiertos: dos en el municipio de Cabaiguán y uno en La Sierpe.
Por otra parte, más de 600 holguineros están aislados por ser contactos directos o sospechosos de portar el nuevo coronavirus. La provincia posee un total de 18 centros de aislamiento para estos casos.
Ciego de Ávila, la provincia que en los dos últimos meses compite con La Habana por el triste galardón de ser la más afectada por la pandemia, presentó 50 de los 73 casos de coronavirus reportados este 1 de octubre. Al cierre de ayer se encontraban unas 142 áreas en cuarentena en ese territorio, de las cuales 36 serían evaluadas.
En una reunión de alto nivel del régimen, el presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez “volvió a alertar sobre la letalidad en la provincia de Ciego de Ávila, el territorio de más alta tasa de incidencia de casos positivos por cada 100 000 habitantes en los últimos quince días”, según una nota del portal de la Presidencia.
En el centro penitenciario provincial de Ciego de Ávila, conocido como Canaleta, hay un brote de coronavirus que involucra a varios trabajadores y población penal, según confirmó la prensa oficialista, después que hace alrededor de una semana comenzaran a circular en redes sociales, denuncias sobre la compleja situación epidemiológica en esta institución.
En un reporte del diario estatal Invasor se indicó que en la central provincial, “todas las áreas de Salud hoy tienen manzanas en cuarentena (…) Mientras que el evento nombrado Canaleta y que involucra al establecimiento penitenciario provincial, ha generado varios casos entre combatientes y población penal”.
Matanzas, por su parte, mantiene bajo vigilancia a unos mil constructores que laboran en Varadero. En su mayoría residen en el municipio cabecera y en Cárdenas.
Mientras tanto, el régimen decretó el fin del toque de queda en la capital para el 3 de octubre, pero mantendrá la prohibición de transporte interprovincial desde y hacia La Habana. Personas que se hayan quedado varadas allí, sus casos se valorarán por el Consejo de Defensa Provincial. Hoy, la capital informó de apenas nueve casos nuevos.
Con 73 nuevos diagnósticos este 1 de octubre, las cifras vuelven a repuntar peligrosamente. El jefe de epidemiología de Ministerio de Salud Pública, Francisco Durán, informó que las cifras totales ascienden a 5670 casos desde que inició la pandemia.