Aunque la pandemia continúa en la isla muchos cubanos planifican sus vacaciones. Realmente son pocas las opciones, por eso, otros prefieren quedarse en casa y mantener el distanciamiento social.
Un equipo de ADN Cuba salió a las calles habaneras para preguntarle a los cubanos de a pie qué harán en estos meses, donde normalmente, en años anteriores, las personas aprovechan para descansar y pasear.
"No estamos para fiesta. Nada, compartir con los muchachos en la casa y más nada. Ahora no se puede estar saliendo", comentó un señor a las cámaras de la revista.
Por su parte, una señora dijo que la pasarían bien, pero cuidándose.
Otra mujer señaló que no vale la pena exponerse por "un ratico de diversión. Yo pienso que haya tiempo después para eso".
Una trabajadora estatal expresó: "Pienso coger mis vacaciones que me tocan en agosto y como ya todo se ha mejorado gracias a este gobierno, que se ha preocupado por todo el mundo y en agosto ya podemos ir a la playa. Los hoteles tienen precios módicos para todos los trabajadores y yo pienso ir con mi familia".
Sin embargo, cada vez son más los barrios de La Habana que regresan al confinamiento y las medidas severas para cortar la transmisión del coronavirus. Los casos confirmados aumentan a pesar del anuncio de las autoridades que aseguraron tener “bajo control” la epidemia y el 3 de julio comenzaron la desescalada en la ciudad más importante de Cuba.
Actualmente se encuentran “bajo reforzamiento de las medidas de aislamiento” por la detección de focos del virus que provoca la COVID-19, zonas de la urbe como Los Sitios (municipio Centro Habana), Amistad, Pilar- Atarés (municipio Cerro), Lawton (municipio Diez de octubre), además de un lugar de San Francisco de Paula (la Habana Vieja) y Cuatro Caminos del municipio Cotorro, informaron fuentes oficiales.
En una reunión de este lunes entre autoridades provinciales del régimen, el jefe del Partido Comunista en la capital cubana, Luis Antonio Torres Iríbar, precisó que además se arreció el confinamiento en el área de Lechuga-Marrero, en el municipio Arroyo Naranjo, “a modo de profilaxis” por su cercanía con el Cotorro y la provincia de Mayabeque, donde hay sendos focos de coronavirus.