El doctor Alexander Pupo, quien se ha convertido en un referente crítico para muchos cubanos, reflexionó este 8 de diciembre sobre la condición del disidente en la isla, un mensaje dirigido a las personas que desconocen cómo viven los críticos del sistema.
Entre otras aclaraciones, Pupo recordó que el disidente en Cuba “tiene que andar siempre cuidando sus espaldas, no del pueblo, sino del gobierno que siempre lo está vigilando. Sabe que será difamado por quienes una vez lo llenaron de elogios y sabe que perderá su trabajo, sus relaciones, sus influencias, y todo por decir la verdad que otros callan”.
“Sabe que será mal mirado en la sociedad y que recibirá ingratitud de muchos a los que defiende y que en cualquier momento le encontrarán una causa para enjuiciarlo y meterlo en alguna prisión, sin otro motivo que luchar por tu libertad”, agrega el galeno.
"Tendrá que ver a sus amigos traicionarlo, no por convicción, sino por miedo a la represión. Tendrá temor de recibir ayuda de otras personas cuando se encuentre en el piso, pues sabe que usarán cualquier excusa para acusarlo de asalariado".
Por esto, Pupo termina preguntándose por qué tantos cubanos se prestan para mutilar la imagen de esas personas y no se unen a su causa, en el entendido de que lo que hacen es para el bien de todos los cubanos.
“¿Por qué has permitido que encarcelen a tus hermanos, a tus héroes y a la única posibilidad que tienes para ser libre?”, se pregunta.
Pupo ha sufrido en carne propia este tipo de situaciones por señalar directamente a la dictadura. Fue acosado en su trabajo y sometido a escarnio por la dirección del hospital donde cursaba la especialidad de Neurocirugía.
A finales de septiembre, ante las maniobras de la dirección del centro en su contra, y la campaña de desprestigio desatada por partidarios del régimen, el joven médico cubano Alexander Raúl Pupo Casas, renunció a continuar su carrera en el Hospital Ernesto Guevara de Las Tunas. No obstante, se reafirmó en su postura anti totalitaria y en el derecho a expresar su desacuerdo con el régimen.
Pupo Casas, ya había denunciado anteriormente acoso laboral y amenazas, que esta vez llegaron además, acompañados de una campaña difamatoria en su contra. Modus operandi del régimen contra quienes no siguen el coro triunfalista y no son cómplices de la falsedad.
El régimen no ha logrado silenciar al joven galeno, quien sigue señalando con palabras afiladas las arbitrariedades de la dictadura castrista.
