El general Luis Alberto López-Callejas, conocido por ser el jefe en las sombras de la economía cubana, ahora es parte del Buró Político del Partido Comunista, el máximo órgano de poder de la principal organización política de Cuba.
Una nota que comparten los principales medios oficialistas de Cuba, lo coloca en el “Politburó” de la nomenclatura junto a Miguel Díaz-Canel, designado como primer secretario luego de que Raúl Castro abandonara el puesto en este VIII Congreso.
López Callejas, exyerno de Castro, es presidente ejecutivo del Grupo de Administración Empresarial de las Fuerzas Armadas, GAESA, que controla el sector más productivo de la economía nacional, asociado al turismo, entre otras empresas importantes.
Este 19 de abril culmina el VIII Congreso del PCC, marcado por la represión a periodistas independientes y opositores en la Isla.
El general de brigada, cuya vida, como la de la mayoría del clan Castro, es casi un misterio, controla al más poderoso grupo empresarial del país. Entre las entidades bajo su amparo está Gaviota, la empresa hotelera que gestiona la construcción y gerencia de esas instalaciones con las compañías extranjeras.
También, CIMEX, encargada de importar y exportar, así como, hasta hace unos meses, de controlar el recibo de remesas, luego de que EE. UU. prohibiera a Western Union continuar con el contrato que tenía con ella.
López-Callejas fue sancionado por Washington, como parte de las medidas que adoptó la administración Trump para aumentar la presión sobre el régimen cubano.