El gerente de Latam Cargo en el Aeropuerto de Miami, Giraldo Castillo, maneja una casa de dos pisos en El Cotorro, La Habana, con restaurante de lujo incluido.
Según un reportaje de El Nuevo Herald, Castillo también es amigo de René González Sehwerert, uno de los espías de la Red Avispa condenados en Estados Unidos por ser agentes no declarados, y en algunos casos conspiración para cometer asesinato en Miami.
“Su amistad con el espía René González es lo que le permite tener una paladar [restaurante privado] donde no falta nada. (…) hay desde cocinas que compiten con cualquier restaurante de Estados Unidos hasta un abastecimiento de primera, imposible de encontrar en otro lugar de Cuba”, aseguró al medio citando a Orlando Rodríguez, quien trabajó por diez años en Latam Airlines como subordinado de Castillo.
Según esa fuente del Herald, Castillo “ha violado reiteradamente las normas de seguridad de Latam y favorece a los empleados que hablan bien del gobierno cubano. A los que critican al sistema les hace la vida imposible”, agregó Rodríguez.
El diario del sur de la Florida tuvo acceso a imágenes del gerente del servicio de carga de Latam Airlines, junto al ex espía René González, ahora presidente de la Federación Cubana de Deportes Aéreos. El piloto y agente de la Seguridad del Estado, recibió una sentencia de 15 años de prisión y regresó a la isla en el 2013, donde fue recibido como un héroe y se codea con altos dirigentes en actos oficiales.
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La investigación de Mario J. pentón para el El Nuevo Herald señala a Castillo como propietario de la Cafetería restaurante “Café Crystal”, en el municipio Cotorro. La compañía Latam aseguró en un correo electrónico al diario que no tiene evidencia de que Castillo haya tenido “ninguna conducta ilegal”.
Café Crystal tiene actualmente dos pisos, y empezó como una cafetería cuando Raúl Castro permitió a los cubanos invertir en restaurantes privados, luego de recibir el poder de manos del dictador Fidel. Según el Herald, el emprendimiento de castillo fue se amplió “al comprar las casas aledañas, crear un parqueo y luego construir la edificación de dos pisos que hoy alberga el restaurante y la casa del propietario”.
“La clave para entender la prosperidad y la riqueza de Giraldo Castillo en Cuba está en el hermano del espía René González, Liván. Ellos son casi familia, según ha dicho él mismo en las redes. Incluso les hizo a los cinco espías una gala de bienvenida a su restaurante”, declaró un ex empleado que pidió al Herald el anonimato.
“Cuando me dirigí a Recursos Humanos de la empresa a quejarme por la manera en que Giraldo trata a los empleados se lo informaron. Más tarde, cuando revelé que él tenía acceso a las cámaras del aeropuerto desde Cuba, un coronel de la Seguridad del Estado visitó a mi familia y les dijo que me estarían esperando cuando regresara a la isla”, aseveró.
Castillo tendría acceso, según las fuentes de la investigación, a las cámaras de seguridad de Latam Cargo desde la isla. “Algunas de esas cámaras dan a una de las pistas del aeropuerto de Miami”, dijo.
Un ex supervisor del Departamento de Mercancías Peligrosas de Latam, Augusto Gómez, quien también trabajó con Castillo dijo que no cree que sea un espía, pero sí “una persona utilizada por la dictadura”.
