Las autoridades sanitarias de Cuba informaron este sábado el diagnóstico la víspera de 1 289 nuevos casos de COVID-19 y el fallecimiento de otras 14 personas como consecuencia de la enfermedad viral, que se ha cobrado la vida hasta el momento de 863 cubanos.
En su habitual conferencia matutina, el director nacional de Higiene y Epidemiología del Ministerio de Salud Pública (Minsap), Francisco Durán comentó que los fallecidos, la mayoría de la tercera edad, presentaban antecedentes patológicos que elevan las probabilidades de desarrollar cuadros de gravedad ante el contagio como hipertensión, diabetes, asma y obesidad, aunque cada vez más se observan complicaciones en pacientes de menos edad y sin comorbilidades asociadas.
Con los nuevos casos confirmados, los casos acumulados desde el inicio de la pandemia en la isla, en marzo de 2020, ascienden a 131 832. Durán precisó que, de los diagnosticados el viernes, 1 199 fueron contactos de casos confirmados con anterioridad, 60 tuvieron su fuente de infección en el extranjero (casos importados) y en 30 no se había podido precisar la fuente de infección hasta el momento del cierre de la información oficial.
Ésta detalla además que, de 6 893 casos confirmados y activos, 136 pacientes permanecen en cuidados intensivos, de los cuales 47 son reportados en estado crítico y 89 como graves.
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La mayoría de los nuevos casos correspondieron a las provincias La Habana (652), Santiago de Cuba (140) y Matanzas (82). La capital ha sido el territorio de mayor complejidad epidemiológica por sus características sociodemográficas, mientras que el resto de los territorios han experimentado altibajos durante el tercer rebrote, iniciado en noviembre, luego de que el régimen reabriese sus aeropuertos internacionales.
El doctor Durán detalló en su conferencia que 28 689 personas están ingresadas, la cifra más alta desde el inicio de la pandemia. Además de las que son casos confirmados y activos, 4 387 son sospechosas de un eventual contagio.
Asimismo, 161 de los nuevos positivos diagnosticados están en edades pediátricas (menos de 18 años). Las cifras establecen que en la isla hay 1 098 menores que son casos activos de COVID-19 y que el 13 por ciento de todos los casos acumulados desde marzo de 2020 son pacientes de menos de 18 años, incluyendo lactantes.
En la isla permanecen 51 eventos activos de transmisión autóctona de COVID-19. Las provincias en las que más se concentran son La Habana, Holguín y Santiago de Cuba, con 17, siete y seis eventos, respectivamente.
