A partir del martes 31 de mayo los cubanos no estarán obligados a usar mascarillas sanitarias o “nasobucos” para evitar contagiarse con el coronavirus, anunció este lunes el Ministerio de Salud Pública (Minsap).
“Como parte de las medidas a cumplir en la nueva etapa relacionada con el control de la COVID-19, se establece eliminar la obligatoriedad de la mascarilla para todas las actividades sociales, excepto en consultas médicas y servicios de hospitalización que así lo requieran, y áreas con restricción durante los controles de foco”, informó el periódico oficial Granma.
En cambio, sí “es obligatorio el uso de mascarillas en las personas que presenten síntomas [de afecciones] respiratorios”, agrega la nota difundida por el medio de prensa gubernamental. Según el Minsap, “es importante que las personas vulnerables continúen haciendo uso de los nasobucos como medida de protección, no solo ante la COVID-19”.
Además, las autoridades orientaron “realizar capacitaciones sistemáticas y actualizadas a todos los trabajadores relacionados con las normas higiénicas de protección individual y colectiva”; y recomendaron “el uso de la mascarila en escenarios con aglomeración de personas, donde no sea posible mantener un adecuado distanciamiento físico”.
En 2020 y 2021 el régimen cubano impuso multas de 2000 pesos y hasta cárcel a ciudadanos por supuesto mal uso de la mascarilla.
Según el Minsap, en 2022 solo “se han diagnosticado 138 mil 785 casos, distribuidos en todos los territorios del país. Por esta causa han fallecido 206 pacientes para una letalidad de 0,15%”.
En el último parte oficial de enfermos por el coronavirus en Cuba, al cierre del domingo 29 de mayo, se encontraban ingresados un total de 1248 pacientes, de ellos 1021, en vigilancia 35 y confirmados como casos activos 192.
El domingo se encontraron 32 nuevos casos positivos a la COVID-19. Cuba 1 millón 105 290 casos positivos, según el oficialismo.
Cifra oficial de muertes en Cuba por COVID-19 podría ser 5 veces mayor
La cifra de muertes por la COVID-19 podría ser mucho mayor que la que reportan hasta el momento las autoridades cubanas, publicó el 16 de mayo Diario de Cuba, tras consultar cifras de la Oficina Nacional de Estadísticas (ONEI).
Según la ONEI, en 2020 fallecieron en Cuba 112 439 personas por diversas causas, mientras que en 2021 esa cifra se elevó a 167 645, una diferencia de 55 204. En ese mismo lapso de tiempo, el Minsap reconoció que hubo 8177 fallecimientos debido a la pandemia, lo que dejaría sin razón aparente unas 47 000 muertes, posiblemente relacionadas con el virus, según Diario de Cuba.
La víspera, el biólogo Amílcar Pérez Riverol aseguró en Twitter que la cifra de muertos podría ser entre tres y cinco veces superior a las registradas en el período 2020-2021, lo que supone una cifra de muertes reales que oscila entre 24 500 y 40 800.
En agosto de 2021, el ministro de Salud Pública, José Ángel Portal Miranda, admitió que las cifras de muertes del Minsap son “imprecisas”, pues “solo ingresan [en las estadísticas] los fallecidos que en el momento de su deceso tienen un PCR positivo”.
