Mientras el régimen cubano con su llamada "Tarea Ordenamiento" aumenta los precios de la escasa comida que hay, en Miami la regalan, para los afectados por la pandemia de COVID-19.
Desde el inicio de la pandemia y hasta la actualidad, en el sur de la Florida y diferentes ciudades estadounidenses, organizaciones caritativas se han unido para proveer de alimentos a personas necesitadas.
Es totalmente gratuito y hasta agotar existencias.
Por ejemplo, esta semana en condados de Miami-Dade y Broward se estarán distribuyendo estas ayudas, reportó el medio Local 10.
También ciudad de Fort Lauderdale está ayudando a cualquier organización con eventos de distribución de alimentos y suministros de emergencia, con apoyo para controlar el tráfico y organizar el flujo de vehículos durante los eventos.
Aumento de precios en Cuba con "Tarea Ordenamiento"
Con la reforma monetaria que se comenzó a implementar el pasado 1 de enero de 2021, el régimen cubano subió drásticamente el costo de la vida en la isla. Esto incluye alimentos, servicios, medicinas y productos de higiene, que además, escasean desde hace dos años.
Nada más lejos de regalar comida y demás artículos de primera necesidad ha estado la "Revolución" que prometió en 1959 no dejar desamparado a nadie.
Uno de los sectores más golpeados por esta medida han sido los ancianos cubanos.
Los nuevos precios que impuso el gobierno para los comedores del Sistema de Atención a la Familia (SAF) oscilan entre 8 y 13 pesos por cada comida, son dos al día y ni con las nuevas pensiones los ancianos y desvalidos pueden costearlo.
Según datos oficiales, en la primera semana de enero solo el 76 por ciento había ido a recoger la comida, siendo la provincia de Ciego de Ávila y el municipio especial Isla de la Juventud los de menor asistencia con un 49 por ciento. Mientras en Cienfuegos apenas fueron a comer el 53 por ciento de los censados, en Las Tunas el 56 por ciento, y en Santiago de Cuba solo el 57.
Precisamente un reportaje del medio oficialista Cubadebate evidenció lo difícil que se ha puesto el escenario para los ancianos.
"Hace falta que bajen un poco los precios y den más comida porque dan muy poquito", dijo el adulto mayor, José Gallén a periodistas del portal estatal.