En las últimas semanas se ha incrementado la presencia policial en las calles de las principales ciudades de Cuba para prevenir un estallido social. Al parecer algunos también han sido enviados –vestidos de civil– a las largas filas que se hacen para comprar comida.
“Este compañero es oficial del Minint y es delegado de la circunscripción 23 [de los CDR], de esa donde está la venta de cerdo, lo pusieron a cuidar y organizar la cola”, aseguró a ADN Cuba una vecina que prefirió mantener el anonimato, por temor a represalias. Esta persona proporcionó fotografías del agente que denuncia, a quien identifica como “Yoel Cagiga”.
Al hombre se le ve con una libreta grande de anotaciones, dando órdenes a los ciudadanos que esperan comprar alimentos en un establecimiento ubicado en las calles 15 y 24 (Vedado, La Habana). El funcionario y agente castrista, aunque no porta uniforme, está calzado con los botines reglamentarios para los oficiales del Ministerio del Interior (Minint). A su lado, el hombre que permanece con una mochila en los hombros, tiene un pequeño banco para descansar de su faena de “controlador de colas”.
Pero según las denuncias, no solo se dedica a esto. “Se aprovecha de su cargo como delegado y como oficial del Minint, y cuando uno se dirige a él maltrata a la gente, deja comprar al que él entiende”, asegura la fuente.
“Los demás, a esperar, pero la carne se la han llevado los compañeros de comercio escondidos por atrás” del establecimiento comercial, denuncia.
“Por eso hemos tenido que pasar 3 y 4 noches para poder coger piernas, porque si no lo que nos dan es costillas”, lamenta la vecina, quien relata hechos ocurridos este fin de semana.
Su versión también ha sido compartida en redes sociales por el usuario identificado como Iván Diaz, quien habla abiertamente de “corrupción” del oficial.
El medio independiente 14ymedio también reportó que “cientos de agentes encubiertos vigilan las colas en La Habana”. “Las filas para comprar alimentos están ahora en el centro de la atención policial y de la Seguridad del Estado”, publicó el citado sitio.
De acuerdo a la información de 14ymedio una jubilada le comentó a otra mientras esperan para comprar pollo congelado en un establecimiento comercial de la calle Belascoaín, en la capital, que los vigilantes son fácilmente reconocibles a pesar de intentar camuflarse. "Mira, aquel de la gorra azul es un seguroso (…) Lo sé porque desde que llegó lo único que hace es escuchar lo que la gente está conversando", dijo la señora.
Otro jubilado del municipio Plaza de la Revolución comentó al referido medio independiente que "en una reunión dijeron que el imperialismo quiere derrotar a la Revolución en las colas y que hay que estar atentos", y fue convocado para "salir al paso a todo el que hable mal de los líderes y de la Tarea Ordenamiento".
Los agentes castristas, miembros del PCC y cederistas con “tareas asignadas” en las multitudinarias colas deben también evitar que “la gente esté haciendo fotos para subirla a las redes y denigrar nuestro modelo", explicó el pensionado. "Cualquiera que veamos con el móvil haciendo una foto o grabando un video podemos llamar a la policía, porque tenemos potestad para eso", precisó.
"(...) cientos de agentes encubiertos vigilan por estos días las filas, con la misión de detectar 'comentarios contrarrevolucionarios' y señalar a los clientes 'conflictivos'", afirmó en su reporte 14ymedio.