La artista y activista cubana Tania Bruguera denunció estar siendo víctima de ataques continuados con un sonido similar al que habrían sido expuestos diplomáticos estadounidenses acreditados en Cuba, y que a la postre les habrían provocado daños cerebrales.
“¿Alguien conoce este ruido? Es como de grillo, pero electrónico y muy alto. No puede ser natural. Se activa cada un minuto más o menos y dura un minuto, minuto y dieciséis segundos, minuto y veintiún segundos, y tengo un dolor de cabeza y de oídos que no se aguanta. El volumen real no se registra en la grabación en realidad es un volumen muy alto y penetrante”, escribió en la madrugada de este domingo 18 de octubre la artista en su perfil de Facebook.
Bruguera compartió además una grabación del sonido, el cual, dijo, se oye mucho más alto de lo que el registro da cuenta, y en toda la casa. “Nunca tengo dolores de cabeza. El último dolor de oídos que tuve fue cuando tenía quizás ocho años o por ahí. Me hice análisis completos antes de venir a Cuba, como siempre hago porque sé que entro a un campo de batalla donde tengo las de perder y tenía todo ok. Sólo me dijeron que bajara de peso preventivamente y he bajado ya 19 libras en estos seis meses, hago yoga 4 días a la semana”, detalló Bruguera en otro post dirigido a sus amigos.
“No tengo problemas de presión arterial ni de absolutamente nada. Mi electrocardiograma dio perfecto, incluso el doctor me dijo ‘you have a young heart’, que me encantó porque lo traduje como que soy una persona que todavía ve el lado bueno de las cosas. Nunca he tenido tendencias suicidas ni asesinas ni ejerzo la violencia física contra nadie (para cubrir todos los flancos) ¿Qué me falta?...No tengo cáncer, no tengo VIH, no padezco de nada congénito... ¿de qué más me pueden acusar?...Ah y como toda artista de performance conozco muy bien mi cuerpo, que es mi instrumento de trabajo”, agregó.
La explicación de Bruguera obedece a que, a partir de su denuncia del penetrante sonido, algunos la acusan de estar inventando y elucubrando teorías conspirativas. “Yo sólo comparto algo que fue fuera de lo normal y muy llamativo. Para ver si me ayudaban a entender qué era”, subrayó, desentendiéndose indirectamente de ser ella quien asoció el sonido a los que presuntamente provocaron daños cerebrales en diplomáticos de Estados Unidos, un episodio que envenenó las relaciones diplomáticas entre La Habana y Washington tres años atrás.
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Sin embargo, la asociación es inevitable. De acuerdo a testimonios de los diplomáticos y las investigaciones iniciales realizadas -aunque otras ponen en entredicho la hipótesis-, los daños serían consecuencia de la exposición prolongada a sonidos penetrantes, descritos como el que registró Bruguera en su casa, a unas cuatro cuadras de la embajada de Estados Unidos en La Habana.
En tal sentido, Deborah Bruguera, hermana de Tania, aseguró en su perfil de la referida red social que confrontaron el sonido grabado en la casa de Tania y "es idéntico al que escucharon los trabajadores de la embajada americana y que, según investigaciones, designaron como arma sónica".
“Ya no hay dudas”, afirmó Deborah, a la vez que explicó que el sonido de Tania puede sentirse un poco más agudo porque se grabó de “una manera precaria”.
Horas antes de la asociación entre los sonidos, Deborah comentó su sentir al leer el post de Tania. Según dijo, la Seguridad del Estado “trabaja fino” en contra de la artista, que sale airosa de todos los ataques “porque tiene mucha paciencia” y “no está sola”.
Apaguen sus aparatos, instó Deborah a los órganos represivos del régimen en caso de que sean sus funcionarios quienes estén detrás del sonido, porque Tania no está sola y si le quieren hacer daño “estarán simplemente creando un héroe”.
“Les puede salir muy mal, ella es solo una más, ella es todos los demás, todos los demás son ella, así que apaguen eso o como siempre el disparo puede volvérseles contra”, concluyó.
