En los últimos días, la televisión local de Mayabeque, al igual que el resto de los medios oficiales de propaganda, ha comenzado una campaña de apoyo a las medidas contra los coleros y revendedores anunciadas por el régimen cubano.
Como de costumbre, ninguna de las opiniones reflejadas en los medios de comunicación estatales contradice las orientaciones del Gobierno. En ese orden de cosas, el canal Telemayabeque publicó en su perfil de YouTube un collage de opiniones donde varios residentes en esa provincia del occidente cubano valoran positivamente las medidas gubernamentales.
En medio de todas las consignas consabidas que reproduce el medio, llama la atención de una cubana que se pregunta por qué las personas compran tanto pollo.
La mayabequense Leticia Hernández Guerra comienza asegurando que las medidas contra los coleros fueron un “buen llamado de atención a las personas”, pero a pesar de eso ―dice la cubana― la gente “no está cumpliendo” las orientaciones.
“Yo misma me dirigí al kiosco El Canal”, narró la entrevistada. “Yo quisiera que usted hubiera visto eso: las mismas personas, tres, cuatro veces, entraban, compraban el pollo (…). ¿Para qué tú quieres tanto pollo? ¿Para qué quieres tanto y tú no priorizas a los demás?”, se preguntó.
Enseguida precisó: “Hay que acabar con eso. (Los acaparadores) vienen aquí a las colas. Hacen tres o cuatro colas y ponen a cinco o seis gentes. Yo no entiendo que en una casa necesiten de todo lo que hay en ese momento cinco, seis, siete, ocho personas de esa misma casa”, se quejó.
Por su parte, Telemayabeque continuó transmitiendo opiniones de respaldo a las medidas anticoleros y no aludió ni una sola vez a la cruda escasez de alimentos y productos básicos de aseo que padecen los cubanos, la cual se agravó con la pandemia de coronavirus.
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La principal consecuencia de la crisis económica cubana ha sido el desabastecimiento de alimentos. Por tal motivo, en los últimos meses funcionarios del régimen le han pedido a la población que produzca alimentos en sus propias casas y patios.
Sin embargo, en vez de concentrarse en la producción de alimentos, el régimen cubano ha lanzado una campaña contra los coleros y revendedores, a quienes ha llegado a culpar del desabastecimiento en las tiendas estatales.
De acuerdo con el medio oficialista Tribuna de La Habana “los coleros serán asumidos jurídicamente como figuras antisociales y en esa calidad será posible abrirles expedientes de peligrosidad a través de los cuales podrían recibir hasta cuatro años de privación de libertad”.
También el diario del Partido Comunista de Cuba, Granma, culpó recientemente a los coleros de la falta de alimentos para ancianos y embarazadas.
Antes de culminar julio la cifra de personas sancionadas por ejercer como coleros durante la pandemia ascendía a 1285.