La Unión Europea (UE) está preparada para bloquear la entrada de los estadounidenses porque Estados Unidos no ha logrado controlar el flagelo, según "The New York Times".
Esa perspectiva es un repudio al manejo del virus por parte del presidente Trump en Estados Unidos, que tiene más de 2.3 millones de casos y 120 000 muertes, por encima que cualquier otro país.
Las naciones europeas actualmente están regateando sobre dos posibles listas de visitantes aceptables en función de cómo los países manejan la pandemia. Ambas listas incluyen a China, así como a Uganda, Cuba y Vietnam. Ambas también excluyen a Estados Unidos y otros países que se consideran demasiado riesgosos debido a la propagación del virus.
Los viajeros de Estados Unidos y el resto del mundo ya habían sido excluidos de visitar la Unión Europea, con pocas excepciones principalmente para repatriaciones o viajes humanitarios, desde mediados de marzo. Pero se espera una decisión sobre la reapertura de fronteras a principios de la próxima semana.
La prohibición de los estadounidenses por parte de Bruselas refleja en parte el patrón cambiante de la pandemia. En marzo, cuando Europa fue el epicentro, Trump enfureció a los líderes europeos cuando prohibió a los ciudadanos de la mayoría de los países de la UE viajar a Estados Unidos. Trump justificó el movimiento como necesario para proteger a su país, que en ese momento tenía aproximadamente 1100 casos de coronavirus y 38 muertes.
Millones de turistas estadounidenses visitan Europa cada verano. Los viajes de negocios son comunes, dados los lazos económicos entre las dos naciones. A pesar de las interrupciones causadas por dicha prohibición, los funcionarios europeos involucrados en las conversaciones dijeron que era muy poco probable que se hiciera una excepción para Estados Unidos, que los criterios para crear la lista de países aceptables se habían mantenido deliberadamente lo más científicos y no políticos posible.
La creación de una lista común de personas externas que pueden ingresar al bloque es parte de un esfuerzo de la UE para reabrir completamente las fronteras internas entre sus 27 estados miembros. Los viajes y el comercio gratuitos entre los miembros son un principio central del bloque, uno que se ha visto gravemente afectado durante la pandemia.
