Según una nota publicada este 7 de mayo en el sitio web de la emisora estatal Radio Titán, en el sector residencial se aprecia un crecimiento del 68 % del consumo de electricidad, "según estimados oficiales que atribuyen el hecho principalmente a la gran cantidad de personas en sus casas por efectos de la COVID-19, aunque su ahorro tiene un carácter tradicional".
Precisando, la Oficina Nacional para el Control del Uso Racional de Energía (ONURE) calcula que en la estructura nacional de su gasto, el estatal disminuiría un 30% y el privado no residencial un 2%.
La situación actual se debe principalmente al aumento de la temperatura, con valores récord en abril, y la ONURE aclaró que "el uso y la generación en determinados días del mes tuvieron impactos similares a los de julio de 2019", sólo posible debido a que muchas familias se encuentran en sus viviendas como parte de las medidas para hacer frente al nuevo coronavirus.
La ONURE reconoció que esa es una de las regulaciones indispensables para frenar la expansión de la COVID-19 pero, aún así, "acudió a la memoria histórica y recordó la existencia de medidas de ahorro de energía que desde siempre se han aconsejado a ese sector a fin de que contribuya a la disminución del consumo", subrayó Radio Titán.
Así mismo la entidad advirtió que si los más de 4 millones de consumidores residenciales no toman conciencia de la necesidad del ahorro, ocurrirá un sobreconsumo de combustible, fundamentalmente Diesel, el más caro que se utiliza en la generación de electricidad en el país, y será afectado el servicio a la población con los molestos e indeseados apagones.
Entre las medidas que subiere la ONURE se encuentran "el encendido solo de las luces y equipos necesarios, el aprovechamiento de la luz natural, sobre todo en el verano", donde los días son más largos, "y el desplazamiento en lo posible las actividades del hogar fuera de los horarios picos de 11:00 am – 1:00 pm y de 6:00 pm – 10:00 pm".
Otras de las medidas recomendadas son, "utilizar al máximo el calor final de la hornilla eléctrica, el encendido del aire acondicionado preferiblemente después de las 10 de la noche y en el caso de los ventiladores su empleo adecuado en los locales, principalmente si no hay nadie".
También debe evitarse abrir los refrigeradores de manera frecuente "y realizar las operaciones de lavado y planchado con la mayor cantidad de piezas posible".