¡Revisen bien el carro antes de comprarlo!: cubanos opinan sobre la venta de autos

ADN Cuba salió a la calle para conocer la opinión de los cubanos sobre la venta de autos usados en divisas... y la mayor parte se muestra muy escéptica
 

Reproduce este artículo


Autos sin garantía, precios exorbitantes, funcionarios que no quieren devolver los vehículos en mal estado … Apenas comienza la venta de autos usados en Cuba y ya se esparcen las malas noticias para los compradores.

“Yo trataría de comprar el auto en la calle, porque me saldría más barato”, reconoció uno de los entrevistados por ADN Cuba, cuando nuestro reportero le recordó que el auto más barato, uno de marca Geely, le saldría en 34 mil dólares.

Un comprador quiso devolver su auto adquirido hacía tres días cuando vio que no funcionaba bien y que no tenía garantía, pero la empresa estatal vendedora, Cimex, dijo que así era el contrato de venta. “¡Revisen bien el auto antes de comprarlo!”, recordó el mismo entrevistado.

Esos autos se venden de segunda mano a precios que en el extranjero no tienen ni siquiera los carros recién salidos de fábrica. El mismo Geely que en Cuba cuesta 34 mil dólares ya de uso, se valora en seis mil o siete mil USD nuevo. Después del precio, lo que más preocupa a muchos clientes es la falta de garantía, porque los autos son usados y pueden fallar sin aviso.

A uno de los entrevistados nuestro reportero le hizo la pregunta “dónde preferiría comprar el auto, en la calle o al Estado”, y el cubano, haciendo una mueca de extrañeza, dijo sin dudarlo: “por supuesto que en la calle”.

En la única tienda habilitada para la venta, en el municipio Playa, se ofertan desde el 25 de febrero 30 modelos de automóviles de segunda mano, todos ellos a precios exorbitantes como 38 mil dólares por un Kia Picanto, 45 mil por un Peugeot 301 automático o 63 mil por un Peugeot 4008, según la lista de Cimex -empresa del Ministerio de las Fuerzas Armadas de Cuba-, que no especifica año o kilometraje. 

Se exige pagarlos con tarjeta de crédito en “moneda libremente convertible” o MLC, es decir, euros o dólares u otra divisa. No se acepta ninguna de las dos monedas en circulación en el país: el CUP o peso cubano ni el CUC o peso convertible.

Esto responde a la política del Estado cubano de recaudar divisas para tratar de aliviar su endémico déficit en la balanza de pagos, en un momento de crisis económica agudizada por el endurecimiento del embargo financiero y comercial de EE.UU. en los últimos meses.

Pese a que los importes de los automóviles puedan parecer exagerados, en realidad incluyen un descuento del 10 % en relación al que según Cimex era su precio real.

La empresa asegura que solo retendrá un 15% de la recaudación y el 85 % lo destinará a la mejora del transporte público, una de las tareas pendientes de las autoridades cubanas.

Hasta 2011 el Gobierno prohibía comprarlos y desde 2013 los grava con un impuesto del 800%, por lo que el compacto más económico en este país puede costar más que un vehículo de lujo en cualquier país de Europa o las Américas.

Tags
 

Relacionados