De acuerdo a lo anunciado por el Ministro de Transporte de Cuba la semana pasada, a partir de este lunes no es necesario portar ningún permiso para acceder o salir de La Habana.
Asimismo, los servicios de transporte interprovincial en la mayor parte del país comienzan lo que el Ministro llamó un restablecimiento “gradual”, en donde ya se encuentran disponibles “un grupo de capacidades” de retorno a algunas provincias desde la capital, según informa la ACN.
Aunque el retorno oficial del servicio ferroviario comienza el próximo día 24 de octubre, las autoridades cubanas han informado que priorizarán el regreso a sus provincias de las más de 9 mil personas que se encuentran varadas en La Habana, según cifras oficiales.
Según el ministro Eduardo Rodríguez, dicho restablecimiento comienza con la salida de un tren hacia Bayamo el propio día 24, hacia Guantánamo el 25, Santiago de Cuba el 26 y el 28 hacia Holguín.
En el caso de los trenes que atraviesan varios territorios, así como los destinados a Pinar del Río, la nota oficial aclara que “se ajustan aún detalles para su restablecimiento”.
Esta es una de las principales incógnitas acerca de la nueva normalidad en Cuba, asumida rápidamente por las autoridades cubanas en las últimas dos semanas y que hoy reporta 47 nuevos casos positivos a COVID-19 en dos provincias.
De los nuevos contagiados, cuya cifra total de casos activos ya alcanza las 370 personas, 31 pertenecen a la provincia de Pinar del Río y otros 16 a Sancti Spíritus, por lo que el regreso del transporte hacia estos territorios podría demorar en ser restablecido.
En el caso de la capital, se anunció la reanudación de un vuelo diario hacia Nueva Gerona, Isla de la Juventud, mientras se espera que aumente en los próximos días la capacidad de estos así como la reaparición de vuelos hacia el oriente del país.
De igual forma, el transporte no estatal podrá acceder nuevamente a La Habana a partir de este lunes.
La semana pasada el gobierno en la capital dio los primeros pasos rumbo a esta medida, autorizando el restablecimiento del transporte urbano con limitaciones de 30 pasajeros de pie en ómnibus articulados y 20 en los rígidos.
Asimismo, se mantuvo “la permanencia de embarcaciones extranjeras y de los tripulantes y pasajeros a bordo de estas en aguas territoriales”, según informó la prensa oficial cubana.
Ante el temor de muchos habitantes de la capital por un rebrote como el ocurrido en agosto pasado, los gobernantes cubanos insisten en que todo depende del respeto a las medidas de seguridad, aunque las condiciones para ello no estén creadas a lo largo del territorio nacional.
