Militares cubanos amenazaron a la joven actriz, directora y youtuber Camila Carballo, mientras ella filmaba en directo un inofensivo video caminado por una calle de La Habana.
La artista transitaba por la calle Galiano, en Centro Habana, interactuando con sus seguidores, cuando al cruzar una calle pasa por delante de dos oficiales de las Tropas de Prevención, un cuerpo élite del ejército que funciona como policía militar, dedicada a capturar presos fugados y soldados y oficiales que delinquen. Aunque su presencia es muy visible desde que comenzaron los peores meses del confinamiento por la pandemia en Cuba, se han desplegado en mayor cantidad desde noviembre, junto con la Brigada Especial del Ministerio del Interior, coincidiendo con las semanas de más conflictividad política y social en el país.
Mientras Carballo comentaba en directo lo tranquilo que estaba el día, unos metros por detrás de ella se ve cómo los militares comienzan a acercarse a la joven amenazadoramente, llamándola de forma inadecuada.
“Apaga el videíto ese”, le ordenó arbitrariamente uno de los “troperos”, temidos por su violencia y preparación física. Luego le exige que lo borre.
Aunque la actriz cuestionó por qué le exigían cortar la transmisión, el militar no cedió y le espetó que ella lo había grabado. Cuando fueron captados los oficiales estaban parados en la vía pública sin hacer nada, y entraron al cuadro casualmente, pero esto fue suficiente para desatar el resquemor de los militares del régimen.
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A mediados de junio, a una pregunta del vocero castrista Humberto López en su programa televisivo Hacemos Cuba, el abogado Joaquín Collado, subdirector provincial de la Organización Nacional de Bufetes Colectivos en la provincia de Villa Clara, dio una enrevesada explicación para justificar a las fuerzas del régimen que impiden a los ciudadanos grabarlos, incluso en acciones violatorias de derechos humanos.
Según el funcionario, grabar no se contempla como delito, pues el “policía es un funcionario público en un espacio público, y en su desempeño no oculta su identidad”. No obstante, “si esa imagen se sube a una plataforma digital sin el consentimiento de esa persona, se está haciendo un uso no autorizado de la fotografía”. El abogado del régimen, sostuvo que los agentes castristas, como personas estarían protegidos por el artículo 48 de la Constitución, que estipula que todos “tienen derecho al respeto de su intimidad personal y familiar, su propia imagen y su voz, su honor e identidad personal”.
Los cubanos que filmen a policías, militares o cualquier funcionario de la dictadura, se exponen también a que lo multen por el Decreto Ley 370 del 2018.
“Es una pena que pasen esas cosas en mis videos en directo. Hay un % que depende de mí, pero hay otro que depende del ambiente donde me rodeo”, se excusó luego del exabrupto policial la youtuber, que crea contenido sobre cine y cultura cubana.
Camila Carballo es una actriz y directora audiovisual, graduada de la Escuela Nacional de Arte (ENA). Ha participado en piezas del grupo teatral El Público y en numerosas obras de ficción de cine independiente.
