En un encuentro en el Palacio de la Revolución con periodistas oficialistas, el gobernante Miguel Díaz-Canel dijo que no se arrepentía del llamado a guerra civil entre cubanos, que hizo el pasado 11 de julio durante manifestaciones populares.
"Yo hice un llamado al pueblo aquel día porque me parecía que era lo correcto y de lo que no me arrepiento ni me arrepentiré. Había que defender contra manifestaciones que no eran para nada pacíficas y eso es un cuento que han metido también", expresó Díaz-Canel el 19 de agosto.
De acuerdo con Díaz-Canel, "pudo haber algún exceso y cuando se terminen todas las investigaciones se explicará, pero aquí no hay nadie desaparecido ni torturado. Se los digo responsablemente, y aquí a todas las familias se les avisó en el tiempo más rápido que se pudo, dónde estaban las personas implicadas".
Díaz-Canel dio la orden a los periodistas estatales de infiltrarse más en las redes sociales, un espacio virtual conquistado por la sociedad civil independiente, según un reportaje en el Noticiero Nacional.
"Es verdad que hemos cometido errores, que han existido trabas, burocracia, problemas, pero aquí hay mucha obra que defender y si hemos llegado a este momento es porque tenemos esas fortalezas", agregó Díaz-Canel.
Según el reportaje en el Noticiero Nacional, estuvieron presentes el miembro del Secretariado del Comité Central y jefe de su Departamento Ideológico, Rogelio Polanco Fuentes; y el presidente de la Unión de Periodistas de Cuba (UPEC), Ricardo Ronquillo Bello.
En el encuentro intervinieron los voceros del castrismo José Alejandro Pérez, de Juventud Rebelde; Adonis Subit Lamí, director del periódico Girón; Rosa Miriam Elizalde, vicepresidenta de la UPEC; Ana Teresa Badía, de Radio Rebelde; entre otros.
"Hoy están las redes sociales permanentes ahí, donde el enemigo está los siete días, las 24 horas. Hay que hacer análisis objetivos, enfrentar lo que tengamos que enfrentar. Tiene que haber crítica y autocrítica. Tenemos que defender dos ideas que ustedes han expresado aquí: entender la gestión de la comunicación como algo vital para la revolución. Vamos a revolucionar la comunicación, como expresó Ariel Terrero", concluyó Díaz-Canel.
El pasado 11 de julio, el gobernante cubano, Miguel Díaz-Canel aseguró que la "Revolución" no permitiría protestas masivas en su contra y dio la orden de enfrentar a los manifestantes.
"La orden de combate está dada, las calles son de los revolucionarios. Estamos convocando a todos los revolucionarios del país, a todos los comunistas, a que salgan a las calles en cualquiera de los lugares en que se van a producir estas provocaciones", agregó.