El Secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, manifestó este martes su solidaridad con la campaña “60 Navidades con Presos Políticos en Cuba”, lanzada por el Observatorio Cubano de Derechos Humanos, y pidió a ciudadanos y gobiernos del mundo que apoyen a los cubanos.
“Hoy quiero expresar mi solidaridad con los más de 123 presos de conciencia víctimas de un régimen que no respeta los Derechos Humanos, y pedir a gobiernos organizaciones y ciudadan@s que se solidaricen con el pueblo de Cuba”, escribió Almagro.
“(…) más de 123 presos políticos pasarán nuevamente estas fechas separados de sus familias. Como ellos, miles de personas son víctimas de detenciones arbitrarias cada año, entre ellos activistas y periodistas independientes”, dijo en su mensaje de apoyo.
El 10 de diciembre último, la ONG Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) lanzó la campaña de sensibilización “60 Navidades con Presos Políticos en Cuba”, con el objetivo de visibilizar a los 123 presos políticos y de conciencia cubanos que pasarán esta Navidad en la cárcel.
También pretende llamar la atención sobre las circunstancias en que fueron detenidos, los abusos que sufren en prisión, y las condiciones en las que viven, hacinados, sin atención médica en muchos casos y con pésima alimentación.
La campaña se extenderá hasta el próximo día 26, indicó la organización en un comunicado.
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“Hacemos un llamado a la comunidad democrática internacional y a la sociedad civil cubana para que se solidarice con estos 123 cubanos que están en la cárcel por el mero hecho de ejercer sus derechos”, dijo Alejandro González Raga, exprisionero político y director ejecutivo de OCDH.
La organización anunció que enviaría en esta Navidad un listado actualizado de prisioneros políticos y de conciencia a la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba y a otras iglesias.
Sobre las violaciones de derechos humanos en Cuba, la organización internacional Human Rights Watch (HRW), dijo en su Informe Mundial 2019, que el gobierno cubano continúa reprimiendo y castigando el disenso y la crítica pública.
“La cantidad de detenciones arbitrarias de corta duración de defensores de derechos humanos, periodistas independientes y otras personas fue sustancialmente menor que en 2017, pero igualmente alta, y hubo más de 2 mil denuncias de detenciones arbitrarias entre enero y agosto de 2018. El gobierno sigue usando otras tácticas represivas, tales como golpizas, denigración pública, restricciones de viaje y despidos de críticos”, agrega el reporte de esta organización.