El doctor del Instituto de Medicina Tropical 'Pedro Kouri' (IPK), Enmanuel Vigil, denunció que este domingo compró un paquete de café en la tienda del Hotel Meliá Cohiba, La Habana, y tenía papel y puntillas dentro.
Según contó Vigil en sus redes sociales, se trata de un café en granos que compró este 22 de agosto "y a la hora de moler en casa, ¡puntillas y papel dentro!.. ¿quién responde por ello?
¡Pregunto!".
De acuerdo con el especialista, el grano se muele bien "hasta que aparecen elementos de esos que ni en películas te imaginas. La denuncia va por todos lados, ¡partía de ladrones que ni en MLC respetan al pueblo!".
Por último hizo referencia al decreto ley 35, aprobado por el régimen para controlar más el internet en la Isla.
"Ojo con los de la famosa 35, aquí tengo todas las pruebas, para que no me vengan a inflar", añadió Vigil.
La publicación en Facebook ya superó los 80 comentarios, en su mayoría, de indignación con esta denuncia.
"Los clientes no son su prioridad y no hay una política efectiva de la denuncia del consumidor. Estamos jugando al Monopolio y no le responden a nadie", escribió la usuaria Rosa María Fernández.
El medio oficialista Cubadebate difundió esta queja, aunque no puso la totalidad de las palabras de Vigil.
No es la primera vez que cubanos denuncian en redes sociales la calidad de los productos que venden en tiendas estatales.
A inicios de julio, residentes en el poblado Carlos Rojas, del municipio Jovellanos, provincia Matanzas, denunciaron que en un establecimiento estatal les vendieron carne molida en descomposición.
"Un picadillo descompuesto, tóxico para la población, fue traído irresponsablemente para la venta al pueblo de Carlos Rojas, por funcionarios del régimen comunista de Castro-Canel, encargados de proveer alimentos al poblado, después de varios días sin traer nada", aseguró el activista Armando Abascal, integrante del Partido por la Democracia Pedro Luis Boitel.
"Estoy denunciando en las condiciones que está ese picadillo, eso no hay quien se lo coma, que el mundo sepa que lo que nos están dando a nosotros los cubanos es comida de cerdo, porque eso ni los cerdos se lo pueden comer en esas condiciones… después de tantos días sin venir nada", añadió.
En noviembre del 2020 trascendió que el café se estaba envasando en los estuches producidos para los jabones marca Lis de la industria ligera estatal.