El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, exigió recientemente la liberación inmediata de Iván Amaro Hidalgo y todos los prisioneros políticos y de conciencia del régimen cubano.
Desde su cuenta de Twitter, Almagro manifestó el viernes su exigencia y la de la comunidad continental y mundial de “la libertad inmediata de Ivan Amaro Hidalgo, injustamente encarcelado por el régimen cubano por promover la democracia”.
“Él y tod@s los presos políticos y de conciencia de la isla deben ser liberados”, agregó el político, al tiempo que ratificó que la organización que dirige está con Cuba y la democracia.
El pedido de Almagro se da en el contexto de la propagación de la pandemia de coronavirus en la isla y todos los países del hemisferio, la que ha sido aprovechada por La Habana, según denuncian opositores y activistas, para aumentar la represión contra los que no siguen cabalmente sus designios políticos.
La organización Cuban Prisioners Defenders (CPD) actualizó la lista de presos políticos en la isla y sumó tres personas en el mes de marzo. De acuerdo con su balance, en Cuba hay, estando pendiente el cierre de abril, 128 condenados injustamente, por motivos meramente políticos.
En los siete últimos meses han entrado en la lista de Prisioners Defenders 24 nuevos Convictos de Conciencia, lo que indica que Cuba sigue en máximos con respecto al encarcelamiento del disenso.
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Recientemente Cuba excarceló a 6 mil 579 personas por el avance de la pandemia de coronavirus. La mayoría de ellas estaban próximas a cumplir sus condenas y a través de “un proceso gradual y con estricto seguimiento”, el régimen decidió que pueden terminar la totalidad de su condena en “libertad condicional”.
De esa forma, La Habana pareció responder a las preocupaciones y exigencias de la sociedad civil y las propuestas presentadas públicamente por la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU ante la crisis del coronavirus, dado que la población penal ha sido definida como población de riesgo.
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Sin embargo, entre los liberados por el régimen no estuvieron ni Iván Amaro ni Roberto Quiñones, encarcelados por motivos políticos. Es de suponer que así como ellos, otros presos de conciencia tampoco hayan sido contemplados en la excarcelación.
Quizás el régimen prefiera su eventual muerte, que tenerlos nuevamente en la calle, exhibiéndole y luchando por el cambio democrático, cada uno desde su trinchera.
