La iglesia Asambleas de Dios de Cuba realizó una publicación el 6 mayo en su página de la red social Facebook donde reclama al régimen una propiedad confiscada en los años 60s del pasado siglo.
"El día 15 de marzo 1963, fue intervenido el Instituto Bíblico de la Iglesia Evangélica Pentecostal de Cuba (Asambleas de Dios). Varios autos del ejército, uniformados y con armas largas irrumpieron en nuestra propiedad y se comenzó un registro a fondo.
"El profesor y director Floyd Woodworth fue arrestado y trasladado a La Habana", escribió la iglesia cubana y añadió que asimismo "se les ordenó a los estudiantes regresar definitivamente a sus hogares. Luego de 24 años de actividad ininterrumpida, y cientos de estudiantes graduados, se despojó a nuestra institución de su centro de enseñanza para la formación de nuestros pastores. ¿Qué mal hizo La Asambleas de Dios para ser expropiada de su instituto?".
Recuerda además que el Instituto Bíblico "contaba con 2 caballerías de tierra (26,84 hectáreas de tierra). Entre sus instalaciones había viviendas para los profesores, almacenes, albergues para los estudiantes y la capilla para celebrar los cultos y servicios. También contaba con áreas cultivables que abastecían el comedor de algunos productos como frutas y vegetales que los propios estudiantes cosechaban. También había unas vacas que daban leche para el desayuno del plantel".
En su publicación, la cual acompañó con varias imágenes del lugar, Asambleas de Dios afirma que este hecho no detuvo la preparación de las nuevas generaciones de ministros para sus congregaciones, pues buscaron alternativas "para suplir la preparación ministerial y hoy son miles los estudiantes graduados de los diferentes niveles educativos".
No obstante la institución religiosa señala que aun así necesitan que les sea devuelto el instituto bíblico.
"En primer lugar, porque nos asiste el derecho. En segundo lugar, porque la enseñanza presencial tiene ventajas insuperables cuando se compara con otras modalidades. Nuestro instituto era formativo en todo el sentido de la palabra".
Añade además que una vez devuelto, "en ese lugar podríamos concentrar varias de nuestras instalaciones y dependencias", lo que los beneficiaría de muchas maneras.
Por último el texto refiere que en estos momentos se encuentran enfrascados "en conversaciones con las autoridades gubernamentales para que se nos compense y podamos tener el ansiado Instituto Bíblico de las Asambleas de dios de Cuba", concluye.