La carrera del régimen por tratar de controlar la inflación está cayendo, como no puede ser de otra manera, en el ridículo o el absurdo que forma parte de su naturaleza.
Este 29 de diciembre la emisora estatal Radio Guantánamo publicó un artículo en su página web en el que informa que como parte de sus acciones contra la inflación y los cuentapropistas, el régimen cubano acaba de regular el precio del "pan con timba".
"Aprueba Consejo de la Administración Guantánamo precios topados para el comercio minorista y la actividad del trabajo por cuenta propia asociada a los alimentos con la presencia de Yucleidy Ramírez Ramírez, Secretario del Comité Municipal del PCC y Henry Rodríguez Terrero, Presidente de la Asamblea Municipal del Poder Popular", detalla el medio.
Recodemos que desde el pasado mes de octubre la administración de Miguel Díaz-Canel desarrolla una especie de cacería de brujas contra los cuentapropistas y los precios de sus productos, como tratando de adelantarse a la inevitable inflación que se avecina en el marco de sus nuevas medidas económicas.
Según el texto de la emisora estatal, la nueva disposición entrará en vigencia el próximo 1ro de enero, como parte de la llamada "Tarea Ordenamiento".
"Los precios comenzarán a regir a partir del próximo 1ro de enero a tenor de la tarea ordenamiento que se implementará en todo el país y se publicará en los diferentes medios de prensa y sitios digitales".
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La nueva lista de precios topados contempla cerca de 200 productos, y de ella destaca el "pan con timba", el cual, con un peso de 116 gramos, tendrá un valor máximo de cuatro pesos. Asimismo, un pan con conserva y queso de 135 gramos costará siete pesos. Pero el problema aquí es que los cuentapropistas que comercializan alimentos ligeros están obligados a adquirir la mayoría de los productos bases en mercados y tiendas estatales, y en esos lugares los precios, por ser minoristas, dejan un reducido margen de ganancia.
Por ejemplo, una libra de mamey tendrá un valor de 5.35 pesos, y un vaso de batido de frutas de 232 mililitros, cinco. Si a esto le sumamos el costo de la leche y de la azúcar, más el gasto de electricidad, tanto para usar la licuadora como para la refrigeración, es evidente que la lista no cuadra con el billete, como se dice en buen cubano.
Un ejemplo más puede ser el del pan con tortilla natural de 116 gramos, que quedó fijado a cinco pesos, aunque ahora mismo un cartón de huevos a precio de empresa está costando 66.00 pesos. El régimen no está en capacidad de cubrir la demanda, de lo cual se desprende que muchos cuentapropistas tendrán que recurrir al mercado informal si quieren ofertar pan con tortilla a sus clientes, y en este mercado, un solo huevo puede costar hasta 10 pesos.
Nada, que la guerra del régimen contra los cuentapropistas no es algo para tomarse a la ligera, porque con tanta presión, al final el que se queda sin oferta es el pueblo.