El pastor evangélico Alain Toledano Valiente respondió al Consejo de Iglesias de Cuba (CIC) por los recientes pronunciamientos de algunos de sus reverendos en contra de la ayuda humanitaria enviada por cubanos exiliados a la isla y acusó a la organización de no tener legitimidad o derecho para hablar en nombre de la Iglesia, pues representa al régimen que reprime.
“Ustedes representan al gobierno que reprime a la Iglesia. Siempre que la Iglesia está dolida, perseguida, abusada, ustedes se mantienen al margen. Ahora, si el gobierno cubano es acusado mundialmente por arbitrariedades y violaciones de los derechos religiosos y humanos, ustedes inmoralmente levantan su voz para defender al sistema enemigo de la Iglesia en Cuba", dijo Toledano Valiente, que enumeró varias violaciones contra la iglesia en la que oficia, sin que el CIC, sobre todo su secretario ejecutivo, Joel Ortega Dopico, les haya defendido o se haya pronunciado.
“¿Dónde estaba usted cuando en el 2007 el régimen cubano entró a nuestra propiedad y nos desalojó de nuestra casa, cuando demolió la iglesia Emanuel, cuando se llevó presos a los cristianos, cuando abusó de los cristianos, cuando decomisó y saqueó todos nuestros bienes?”, cuestionó el pastor santiaguero a Ortega Dopico, uno de los que más arremetió contra la iniciativa de la ayuda humanitaria e intentó denigrar a sus impulsores.
Toledano recordó que en 2007 el régimen abusó de su familia y le apresó por delitos fabricados, cuando lo único que ha hecho es “predicar el evangelio”. “Les molestó ese crecimiento (el de la iglesia que oficia) y abusaron, reprimieron y robaron a la iglesia Emanuel”, subrayó en sus declaraciones, compartidas a través de su cuenta de Facebook.
Asimismo, recordó que en febrero de 2016, cuando él estaba en Miami, represores del régimen aprovecharon su ausencia y entraron a su casa, donde abusaron de su esposa e hijas pequeñas, “que han quedado traumatizadas”.
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Para el pastor todo ha sido injusto, pues su único “delito” y el de su familia ha sido “predicar el evangelio” y liderar una iglesia que ha crecido rápidamente. “Comenzó con cinco personas” y ya reúne a “más de mil”.
Ante todas esas arbitrariedades, denunció, el CIC “se ha mantenido en las sombras”. Por eso, consideró deleznable que esa institución se tome el derecho de “hablar en nombre de todas las iglesias en Cuba” y rechazar una ayuda que muchos necesitan.
De igual forma, interpeló al CIC y le preguntó que por qué no interviene a favor del establecimiento de la Ley de Asociación y Culto "que toda la iglesia en Cuba, la que ustedes dicen que representan, está esperando, para quitarnos de arriba la condena y la malicia del gobierno", a cuyos ojos la iglesia Emanuel y otras tantas son ilegales.
De acuerdo con Toledano, el 90 por ciento de la iglesia en Cuba no está inscrita en el Registro de Asociación y Culto oficialista, y a muchos pastores evangélicos se les niega su libre movimiento, tanto dentro como fuera del país.
“Ustedes (el CIC) no han sido capaces de levantar la voz para defender el derecho de la Iglesia en Cuba”, remarcó el santiaguero, quien tiene pendiente una causa judicial por el presunto delito de enriquecimiento ilícito.
El líder religioso ha denunciado ser víctima de una campaña de acoso y descrédito del régimen que, a su juicio, citado por Radio Televisión Martí, busca erosionar la labor cristiana que está realizando.
