Las autoridades migratorias cubanas detectaron durante 2021 más de 230 casos de ciudadanos que intentaron salir del país con documentos de viaje fraudulentos o adquiridos ilícitamente, informó este viernes la mayor Tatiana Pupo Gómez, jefa de Departamento en la Dirección de Identificación, Inmigración y Extranjería (DIIE) del Ministerio del Interior (Minint).
Entrevistada como parte de un reportaje televisivo para alertar sobre estafas relacionadas con visas falsas y otros documentos migratorios ilícitos, Pupo Gómez explicó que la mayor parte de las falsificaciones detectadas son documentos que sirven para transitar por territorios de Centroamérica, con el objetivo final de llegar a territorio estadounidense.
La funcionaria consideró que muchos cubanos son víctimas de estafa o acuden a documentos falsos ante las limitaciones de visa que tienen por el cierre del consulado de Estados Unidos en La Habana.
También alertó que los ciudadanos cubanos que intenten utilizar documentación migratoria falseada en su tránsito por otros territorios y sean detectados por autoridades migratorias de otros países podrían ser retornados a Cuba en calidad de deportados.
El reportaje expuso el caso de una cubana llamada Elizabeth, que adquirió una visa falsa hacia México por más de 6.000 dólares y fue detectada en el aeropuerto internacional José Martí, de La Habana.
El pago a los falsificadores fue hecho por el novio de Elizabeth desde Estados Unidos sin conocer que estaba adquiriendo documentación ilícita, según expuso la cubana, cuyo rostro y nombre completo se protegió en el reportaje.
Tras ser estafada en su intento de reunirse con su novio, Elizabeth recomendó a los cubanos con intenciones de viajar a cualquier país acudir siempre a los canales y vías establecidos.
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Las autoridades migratorias cubanas han advertido que cualquier trámite que no se haga en las oficinas de la DIIE o en las sedes diplomáticas en territorio nacional estarían fuera de la legalidad.
El Minint alertó en octubre sobre el aumento de ilícitos en territorio nacional relacionados con falsificaciones de visas y residencias de otros países, lo que implica riesgos para todos aquellos que buscan viajar o emigrar mediante operaciones y trámites ajenos a los canales oficiales.
En una nota oficial, la DIIE detalló en ese entonces que había atendido en aeropuertos internacionales a ciudadanos cubanos que pretendieron viajar a determinados países con documentos de viaje que no cumplían con las medidas de seguridad establecidas y, por tanto, eran derivados de falsificaciones.
En entrevista a los portadores de los documentos falsos para conocer los trámites y acciones que emprendieron para su obtención, se reiteraron modos de actuación habituales en estos casos como “el empleo de redes sociales para conexiones y coordinaciones, mediante personas que por lo general no conocen y ni siquiera han visto físicamente, y citas en lugares ajenos y distantes de la sede diplomática, para el intercambio de papeles y efectivos”, detalló la nota.
También la presencia de terceros “para evitar el contacto directo con el gestor u organizador principal, a quien identifican por un alias, sin más datos, y sumas significativas de efectivo que incluyen la visa o la residencia, y la supuesta ‘agilidad y viabilización del trámite’”, agregó.
