Con la muerte del general de División Luis Alberto Rodríguez López-Calleja, presidente del conglomerado militar cubano Grupo de Administración Empresarial (Gaesa), sale de la escena política de la isla uno de los más enigmáticos y poderosos personajes del castrismo.
El fallecimiento de Rodríguez López-Calleja, anunciado este viernes 1 de julio por la prensa estatal, fue atribuido oficialmente a un “paro cardiorrespiratorio”. El comentarista político Juan Juan Almeida afirma que el general empresario padecía un cáncer.
Desde su nombramiento, a mediados de los 90, al frente de Gaesa, el exyerno de Raúl Castro fue el arquitecto del sistema económico cubano enfocado en el desarrollo hotelero, pero no se conocía mucho de su vida privada ni la de su familia. Solo en los últimos años, tras la expansión del holding militar y el agravamiento de las condiciones de vida de las mayorías en la isla, salieron a la luz los privilegios de personas antes tan desconocidas como Vilma Rodríguez Castro, hija de Rodríguez López-Calleja con Deborah Castro.
La nieta del general de Ejército Raúl Castro posee y ofrecía en alquiler en Airbnb, al menos hasta 2019, una lujosa mansión por 650 dólares la noche, según un reportaje de CiberCuba. El inmueble de la calle 20 y la 7ma avenida, en el exclusivo barrio habanero de Miramar, era promocionada como Casa Vida Luxury Holidays. Cuenta con cuatro dormitorios, cinco baños y un jacuzzi.
Tras el escándalo por el lujoso alquiler a cargo de una integrante de la familia Castro, la información de Casa Vida –que hasta entonces tenía la foto y el nombre de la hija del presidente de Gaesa– cambió, y su propiedad fue adjudicada a otra persona con residencia en Madrid, identificada como “Anabel”.
Según dijo en una entrevista el actor Carlos Alejandro Rodríguez Halley, sobrino de López-Calleja que rompió con su familia por la represión de las protestas de julio de 2021, “probablemente el Airbnb haya estado a su nombre [de Vilma], pero yo conozco a la dueña de esa mansión, vive aquí (España), es amiga de mi prima, pero esa casa no es de ella”.
En cambio, “varias fuentes consultadas (…) han asegurado que Vilma Rodríguez continúa siendo quien alquila el inmueble y que el cambio de nombre responde a una estrategia para desmarcarse tras la noticia”, afirmó CiberCuba.
Vilma Rodríguez, que según CiberCuba aparecía en la plataforma Airbnb “viviendo en Panamá” y se ha hospedado en costosos apartamentos de Ginebra, París y Nueva York, es hermana de Raúl Guillermo Rodríguez, alto oficial del Ministerio del Interior y guardaespaldas de su abuelo Raúl Castro, pero también conocido por sus excesos en la farándula.
El esposo de Vilma es el artista visual Arles del Río, que expuso sus obras en la feria Art Basel de Miami en 2019, y también presentó una instalación en Times Square, Nueva York. Según Diario de Cuba, la pareja de la nieta de Castro fue beneficiado por el régimen en 2014 con la entrega de un enorme almacén en la calle 12 entre 1era y 3ra, en el Vedado, para que construyera su galería estudio.
En septiembre de 2020, aún bajo la administración Trump, el Departamento del Tesoro prohibió a los viajeros estadounidenses alojarse en propiedades del gobierno cubano, e incluyó la casa que alquilaba la nieta de Castro.
Tras el anuncio de sanciones del gobierno de Estados Unidos que alcanzaron a la mansión alquilada por Vilma, el régimen protestó a través de su cancillería.