La policía de Camagüey encontró el cadáver de Yordy Abizain Bandera, el joven de 17 años que había desaparecido el domingo 31 de enero en el municipio Florida, informaron sus familiares.
Su prima, Saimy Sainz Rodríguez, aseguró en Facebook que Yordy había sido asesinado y exigió justicia. Sainz confesó que la familia está “destrozada” y calificó de “monstruo” a la persona que cometió el crimen, aunque no dio más detalles.
Varias personas comentaron la publicación y enviaron mensajes de solidaridad a los parientes del muchacho, cuyo asesinato pudiera ser el resultado de un altercado por cuestiones de dinero, según una publicación de Sainz la víspera.
Abizain había sido visto por última vez el domingo en la tarde cerca del Hospital Pediátrico de su municipio. Salió temprano de su casa en su moto eléctrica y nunca regresó.
La usuaria en Facebook, Yanlee Thebest, quien se presentó en un post sobre la desaparición del joven camagüeyano, como su hermana, denunció que “la policía no hace nada”.
Mientras, el niño cubano Yosvany Villar Ávila, de solo 14 años, también está reportado en el país como desaparecido, el pasado día 25 de enero se cumplieron 45 días desde que no regresó a su casa, en el barrio de Lawton, La Habana, según denunció su familia.
Airobis Ávila Pérez, la mamá del niño, contó al medio Diario de Cuba, que el menor fue visto por última vez el pasado 11 de diciembre, cuando se encontraba jugando en la esquina y supuestamente vecinos lo vieron "con un moreno alto".
Villar Ávila padece una discapacidad mental, por lo que la madre, quien tiene que velar por otros seis hijos, está desesperada pidiendo ayuda.
Respecto a la colaboración de autoridades que han recibido, la abuela, Elena Pérez Alfonso, declaró a ese diario que hasta la fecha solo les tomaron un retrato hablado sobre el hombre que supuestamente se llevó a su nieto.
A finales de diciembre pasado, el menor José Manuel López, residente en un poblado del oriental municipio cubano de Manzanillo, fue encontrado muerto luego de varios días perdido.
