Luego de ser golpeados por funcionarios del Mincult y agentes de la policía política, los artistas que se encontraban frente a esa dependencia estatal fueron subidos a ómnibus y sacados del lugar.
Se desconoce a dónde los condujeron. Yunior García Aguilera, uno de los manifestantes que estuvo allí el 27 de noviembre, confirmó a ADN Cuba la detención mientras iba camino al lugar.
El cordón policial en las afueras le impidió entrar, pero pudo escuchar los gritos de los funcionarios del Mincult quienes hacían una especie de “acto de repudio” mientras agredían físicamente a los artistas pacíficos.
En esos mismos momentos, una turba formada por funcionarios del ministerio y, posiblemente, agentes de la Seguridad del Estado infiltrados allí, se abalanzaba sobre los manifestantes, poco más de 10, y los golpeaba como si fueran delincuentes.
Entre los atacantes se encontraba el propio ministro, Alpidio Alonso, y sus segundos, Fernando Rojas y Fernando León Jacomino, quien se mantuvieron un poco en la distancia, pero no lo suficiente como para evitar las cámaras de los medios independientes, que captaron su complicidad.
Poco antes, Rojas exigió a los artistas frente a la sede ministerial que desalojaran los alrededores.
Los artistas habían acordado con Rojas una nueva ronda de negociaciones a través de varios correos en diciembre, pero los artistas fueron hasta el Ministerio a pedir explicaciones por las injurias vertidas contra ellos en medios estales y en espera de que el funcionario cumpliera con su palabra.
ADN Cuba supo que el régimen rápidamente convocó a sus fuerzas de seguridad y cercó las calles para evitar otra manifestación como la del 27 de noviembre, cuando se congregaron allí más de 400 personas.