Cuba registró este sábado el sexto sismo perceptible en la isla en lo que va de año, el cual tuvo una magnitud de 4,3 grados en la escala de Richter y estuvo situado a 32 kilómetros al suroeste de Cabo Cruz, provincia de Granma.
El evento, que se produjo a las 16:01 horas, fue perceptible en varias localidades de Niquero, en el suroeste de la referida provincia. El Servicio Sismológico Nacional Cubano localizó su epicentro en las coordenadas 19,60 grados de latitud norte y 77,88 grados de longitud oeste, a una profundidad de 35,4 kilómetros.
Al cierre de la información no se reportaban daños materiales ni humanos.
El portal oficialista Cubadebate destacó en su reporte sobre el sismo que en la misma zona en la que se registró éste, ocurrió el terremoto del 25 de mayo de 1992, con una magnitud de 6,9, que causó daños en el territorio de la provincia de Granma y fue perceptible en todo el oriente de la isla.
El quinto sismo perceptible en Cuba de 2022 se produjo en la madrugada del domingo 28 de agosto y tuvo una magnitud de 3,4 en la escala de Richter. Su epicentro estuvo localizado a unos 40 kilómetros al suroeste de Caimanera, Guantánamo, a una profundidad de 21 kilómetros.
El Centro Nacional de Investigaciones Sismológicas de Cuba recibió reportes de perceptibilidad en las provincias Santiago de Cuba y Guantánamo.
Dos de los otros cuatro sismos perceptibles en lo que va de año en Cuba tuvieron lugar también en Granma: uno el 5 de enero, en Buey Arriba, a las 5:32 horas, con una profundidad de cinco kilómetros y una magnitud de 3,2, y el otro el 26 de enero, en Pilón, a las 23:51 horas, con una profundidad de 15 kilómetros y una magnitud de 4,0.
Los terremotos y sismos no son comunes en Cuba. No obstante, en 2020 se sintieron en territorio cubano más de 25 temblores, una actividad sísmica superior a la del año precedente, aunque de baja intensidad.
La isla está ubicada en un punto geográfico en el que confluyen diferentes sistemas de fallas tectónicas con una importante actividad sísmica.
La región oriental es la que con mayor frecuencia concentra los movimientos telúricos, aunque los sismólogos locales han advertido que estos pueden ocurrir en cualquier zona del país.
