Especialistas cubanos calificaron de “muy alta” la actividad sísmica en Cuba tras detectar en lo que va de año más de 3000 terremotos en la isla y zonas aledañas, informó Granma este 11 de julio.
Entre enero y junio de 2022, el Servicio Sismológico cubano registró 3720 terremotos, de ellos 1470 en el área de Cuba. Se contabilizaron fuera del territorio nacional 2250, de ellos 1115 de la zona suroeste de Haití.
Hasta el momento no se han notado incrementos anómalos, a pesar de una actividad sísmica muy alta al sur del país, específicamente al suroeste de Haití, debido al terremoto de 7.3 de magnitud del 14 de agosto del pasado año, indica la fuente especializada en su reporte semestral.
Durante el primer semestre, la sismicidad del año 2022 en el territorio nacional se ha caracterizado por estar mayormente relacionada con la falla Oriente. El día de mayor actividad fue el 14 de marzo, con 22 terremotos.
Según el Servicio Sismológico, la zona con mayor movimiento en ese período continúa siendo Santiago-Baconao, con 705 sismos, y la zona más energética es Paso de los Vientos-Gran Inagua.
En lo que va de año, solo cuatro sismos han sido perceptibles en Cuba. Dos de ellos fueron en Granma, uno en Buey Arriba el 5 de enero, con profundidad de 5 km y una magnitud de 3.2; y el otro el 26 de enero en Pilón, a una profundidad de 15 km y con una magnitud de 4.0.
Los terremotos y sismos no son comunes en Cuba. No obstante, en 2020 se sintieron en territorio cubano más de 25 temblores, una actividad sísmica superior a la del año precedente, aunque de baja intensidad.
La isla está ubicada en un punto geográfico en el que confluyen diferentes sistemas de fallas tectónicas con una importante actividad sísmica.
La región oriental es la que con mayor frecuencia concentra los movimientos telúricos, aunque los sismólogos locales han advertido que estos pueden ocurrir en cualquier zona del país.
Los dos sismos más intensos en la historia de Cuba datan del 11 de junio de 1766 (7.6 grados) y el 20 de agosto de 1852 (7.3 grados).