A dos años del secuestro de los médicos Assel Herrera y Landy Rodríguez, el presidente cubano Miguel Díaz-Canel aseguró que su gobierno hace todo lo posible por traerlos de vuelta.
Según explicó este 12 de abril, habló con los familiares de los galenos para ratificarles su compromiso de “traerlos de vuelta” y les envió el saludo de su homólogo de Kenia, país donde fueron secuestrados los dos médicos.
Ambos especialistas fueron raptados por estas fechas por el grupo yihadista Al Shabab y trasladados a Somalia. El Gobierno keniano reitera que siguen vivos, pero crecen las incógnitas sobre su posible liberación.
“La información que tenemos es que los médicos cubanos siguen vivos”, aseguró a Efe el portavoz del Ejecutivo de Kenia, Cyrus Oguna, quien rehusó dar detalles “por la sensibilidad de la situación y también para no comprometer los planes en curso”.
“Todas las fuerzas bajo la Unión Africana (desplegadas en Somalia) están trabajando para garantizar que, cuando se ponga en marcha la operación, los dos doctores puedan ser rescatados vivos y (...) puedan reunirse con sus familias”, subrayó Oguna.
El cirujano Landy Rodríguez y el especialista en medicina general Assel Herrera Correa fueron secuestrados en la ciudad keniana de Mandera (noreste), en la frontera con Somalia y blanco de numerosos ataques yihadistas en el pasado.
Aquel 12 de abril de 2019, los dos médicos se desplazaban, como de costumbre, en un convoy al hospital de Mandera acompañados de escoltas armados cuando fueron interceptados tras un tiroteo en el que falleció uno de los policías que velaba por su seguridad.
Durante su cautiverio, han estado ofreciendo sus servicios (médicos) a la gente en territorio controlado por los yihadistas.
En octubre de 2020, un alto funcionario de la Agencia de Inteligencia de Somalia (NISA) que pidió el anonimato, confirmó a Efe la liberación de los galenos, pero, tras desmentir el Gobierno de La Habana la información, dio marcha atrás alegando que la operación se había visto frustrada en el último momento después de que una “filtración” paralizara el “traslado seguro” de los rehenes.
En el terreno diplomático, los gobiernos siguen ceñidos a la información aséptica sobre contactos telefónicos y trabajo conjunto.
Tras el secuestro, las autoridades kenianas reubicaron en zonas más seguras a doctores cubanos desplegados en condados de Kenia limítrofes con Somalia, donde Al Shabab lucha por implantar un Estado islámico de corte wahabí (ultraconservador).
Desde del derrocamiento en 1991 del dictador Mohamed Siad Barre, Somalia es un país azotado por el conflicto y el caos, sin un gobierno efectivo para todo el territorio y en manos de milicias islamistas y señores de la guerra.