Dos ciudadanos cubanos fallecieron en la isla a causa de la Covid-19, uno de ellos residente en EEUU, según reportó el Ministerio de Salud Pública (Minsap) este 30 de diciembre.
Se trata de dos ancianos, de 73 y 77 años. Uno residía en Guanabacoa, provincia La Habana, y el otro, el mayor, estaba de visita en Las Tunas, aunque vivía en Estados Unidos. Ambos presentaban antecedentes de comorbilidad.
Las autoridades cubanas no dieron más detalles sobre el anciano que llegó desde América del Norte ni cuál fue su punto de internación.
Con estos dos nuevos decesos se eleva a 145 el número de muertes desde que se reportara el primer caso de coronavirus en marzo. La cifra total de infectados ascendió además a 11 687 con los 86 casos nuevos reportados este miércoles.
Del total, 34 fueron contactos de casos confirmados y 48 con fuente de infección en el extranjero, lo que confirma la tendencia de los últimos meses sobre la importación mayoritaria de personas enfermas desde el exterior.
En el parte de este miércoles destaca también la alta dispersión de la enfermedad por la isla, ya que se reportan casos en La Habana, Villa Clara, Holguín, Santiago de Cuba, Granma, Camagüey, Cienfuegos, Matanzas, Mayabeque, Pinar del Río y Artemisa.
En una conferencia de prensa extraordinaria hoy, el jefe de Epidemiología del Minsap, Francisco Durán, pidió a los cubanos que se mantuvieran en sus casas durante las fiestas decembrinas y recordó que la mayor parte de los casos llegan del extranjero.
En tal sentido, Cuba reducirá el arribo de vuelos procedentes de Estados Unidos, México, Panamá, Haití, República Dominicana y Bahamas a partir del 1 de enero, debido al aumento de casos de coronavirus procedentes de esos países.
Según explica el portal Cubadebate, el 71,5 % del total de los casos detectados en las últimas semanas proviene del extranjero, especialmente de los destinos antes mencionados.
“Tan pronto la situación epidemiológica lo permita, se restablecerá gradualmente la frecuencia de vuelos”, agregó el sitio.
“A su vez, y como ya se ha informado, se ha decidido establecer como requisito obligatorio para la entrada a nuestro país de todos los viajeros internacionales, la realización de una prueba PCR con resultado negativo a COVID-19, con 72 horas de antelación de iniciado el viaje. Esta medida entrará en vigor a partir del 10 de enero de 2021”, puntualizó.
Cuba permitió el arribo de vuelos internacionales en octubre para reactivar el turismo, su principal vía de ingresos, afectado por las restricciones asociadas a la COVID-19.
Los viajeros que arriban a la isla son sometidos a una prueba rápida de COVID-19 en el aeropuerto de entrada y deben guardar cuarentena en sus hogares u hoteles durante cinco días, pero el procedimiento no está arrojando los resultados esperados.
Rápidamente comenzaron a reportarse casos de coronavirus de viajeros procedentes de Alemania, Polonia, Rusia, entre otros países, que el régimen trataba de ocultar presentándolos como extranjeros residentes en la isla.
Uno de estos casos fue el asociado a turistas rusos que llegaron al polo vacacional ubicado en el archipiélago Jardines del Rey en la provincia Ciego de Ávila. En los partes aparecían como residentes en el municipio Morón, donde radica un laboratorio para analizar las pruebas PCR de los vacacionistas extranjeros.
Desde noviembre, los reportes del Ministerio de Salud Pública muestran cifras que sobrepasan los 100 casos diarios de coronavirus —un número alto para la isla— y una dispersión evidente de la pandemia en todo el país, cuando hasta septiembre el foco se reducía a La Habana.