Un grupo de artistas cubanos se congregaron este 27 de noviembre en la sede del Ministerio de Cultura para protestar por la represión contra los miembros del Movimiento San Isidro y exigir la liberación del músico disidente Denis Solís.
Los manifestantes, unos 50, lograron reunirse con la secretaria del ministro, Alpidio Alonso, quien les comunicó que serían atendidos por algunos asesores del funcionario, aunque los artistas dijeron que se mantendrían en la sede hasta reunirse con Alonso en persona.
La secretaria que los atendió dijo que sólo podrían entrar al despacho del ministro unas seis o siete personas, supuestamente para respetar las medidas higiénicas relacionadas con la pandemia de la COVID-19.
En el diálogo que sostuvieron unos y otros, la mujer aseguró que el Ministerio de Cultura había atendido “asuntos peores que este” —la represión contra el Movimiento San Isidro—, pero los manifestantes aseguraron que “hoy no hay situaciones peores, estamos en una situación excepcional”.
Muchos cubanos no han dudado en salir a las calles a exigir la liberación de Solís y mostrar solidaridad con San Isidro en diversas partes del mundo. Se registran pequeños actos públicos en Madrid, Barcelona, Nueva York y Miami. Sin embargo, en Cuba han sido más bien escasos los eventos de protesta.
Para este 27 de noviembre, la diáspora antillana en Madrid y Miami convocó a sendos actos públicos en esas ciudades.
Los miembros del MSI sostienen que la presión internacional es indispensable para lograr la liberación de Solís, su principal reclamo. Solicitan sobre todo la presión de organizaciones como la Comisión de Derechos Humanos de la ONU y la Unión Europea.
Hasta el momento organizaciones internacionales se han pronunciado contra estos actos, como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH); Artículo 19; Human Rights Watch, Cubalex y otros.
Los huelguistas acuartelados en el local de La Habana Vieja fueron puestos en libertad cerca de la medianoche de ayer luego de un operativo policial que terminó abruptamente, y de manera violenta, la protesta pacífica para exigir la libertad del músico opositor Denis Solís.
La esposa del activista y colaborador de ADN Cuba, Esteban Rodríguez, confirmó en varias llamadas a nuestra redacción, envuelta en llanto, que se los habían llevado a todos de forma violenta y que ella fue conducida por la policía de vuelta a su casa.
Poco antes, el régimen bloqueó las redes sociales Instagram y Facebook, en lo que parece fue un intento por evitar que la información del arresto llegara al extranjero. Sin embargo, activistas y ciudadanos en Cuba y fuera de la isla dieron cuenta rápidamente de lo sucedido.
Las protestas del Movimiento San Isidro iniciaron cuando el joven músico Denis Solís González fue condenado a ocho meses de prisión por ‘desacato’, tras ser detenido violentamente el 9 de noviembre de 2020, en las calles Habana y Paula, a unas cuadras de su casa, y le realizaron un juicio sumario dos días después.