El pasado 27 de septiembre apareció en la calle Apodaca, del municipio Habana Vieja, un caballo moribundo, a raíz de la "inanición, debilidad, agotamiento", denunció la abogada cubana Cecilia Gutiérrez Alonso en sus redes sociales.
Las imágenes compartidas el pasado lunes en Facebook de Gutiérrez Alonso muestran a un caballo blanco inconsciente en el suelo de la calle, con signos visibles de desnutrición y falta de higiene.
De acuerdo con ella el caballo aparentaba tener anemia a causa de "ser explotado y no recibir luego los alimentos y cuidados adecuados".
"Quisiera saber esa mayoría que cree que los animales no sienten, no padecen, no necesitan, no merecen... Gente, de estas “bestias’’ solo nos diferencia la capacidad de hablar y andar en dos patas. Tanto como nosotros necesitan descansar, dormir, alimentarse, bañarse, ingerir medicamentos lo mismo que hacemos nosotros para vivir fuertes y saludables", agregó.
Según le contaron testigos, cuando el animal cayó al suelo solo recibió palos para que se levantara.
"Como persona me duele, me irrita, me molesta, como jurista me pregunto: tenemos un decreto nuevo de protección animal, ahora bien, ¿dónde están o cuando llegan los mecanismos de control para hacer ejercer lo dispuesto en tan anhelado cuerpo legal y que este no se convierta en una ley muerta?".
Por su parte, el dueño del caballo explicó que pasó todo el día llamando a instituciones supuestamente encargadas de la protección animal y no tuvo respuesta.
"Llegaron unas amistades del señor a ayudarlo a llevarse a esa criatura que ha pasado hoy más de ocho horas expuesto al sol, calor, hambre, sed y agotamiento y todo cuanto existe, y en este instante creo están intentando trasladarlo no se para dónde, pues en un intercambio no tan amistoso con el dueño dice que él lo quiere como a un igual (cosa que evidentemente tampoco es cierta) pero si él lo dice quién soy para decirle lo contrario", concluyó Gutiérrez Alonso.
El 26 de febrero de 2021 el Consejo de Estado cubano aprobó el Decreto-Ley de Bienestar Animal, tras fuertes presiones de los activistas por la causa y entró en vigor tres meses después.
"Con la aprobación del Decreto-Ley de Bienestar Animal se da respuesta a las numerosas opiniones, expresadas en el proceso de consulta popular del proyecto de Constitución de la República de Cuba, sobre la necesidad de la existencia de una legislación específica de bienestar animal", sentenció entonces el oficialismo.
Días antes, el 19 de febrero, tuvo lugar una protesta de activistas afuera del Ministerio de Agricultura (Minag), donde exigían una ley de bienestar animal inmediatamente.