Diasniurka Salcedo, conocida por su activismo político a favor de una Cuba democrática, denunció este fin de semana en sus redes sociales que ha tenido vigilancia desde temprano.
Hermanos, dijo, "estoy esperando que vengan a buscarme presa en serio".
Contó que al ver al vigilante que tenía en los exteriores de su vivienda, ella le gritó a su hijo "me cansé, cógeme el revolver ahí".
Añade emoticones de risa a pesar de la seriedad del asunto porque, asegura, el vigilante "salió en u", es decir, dio la vuelta y se fue.
La activista, no obstante, se mantiene alerta ante posibles represalias de la Seguridad del Estado: "me inmagino ahora vengan por portar arma de fuego, se fue como que volando, esperemos ahora".
Esta madre de un niño con leucemia, según publicó recientemente, recibió muestras de apoyo y solidaridad ante lo ocurrido este domingo: "Si los tienes así movilizados es porque estás haciendo un excelente trabajo. Tú haces lo que los dictadores no, AYUDA CUBANO A CUBANO"; "Qué trabajo el de este inepto gobierno! Pues tu excelente trabajo los tiene en guardia permanente"; "Hasta cuándo las personas van aguantar"..."Por qué no se unen a esta mambisa, caballero no sean más carnero por dios, no quieren ver"...
Hace algunas semanas Salcedo se pronunció contra la reapertura del curso escolar en un escenario de rebrotes de COVID-19 en la isla. Exponía en un post por qué no iba a mandar a la escuela a su hijo enfermo de leucemia.
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"Estas palabras van dirigidas directamente a la ministra de educación, mi único hijo padece leucemia linfoblastica aguda y no lo voy a mandar a la escuela porque no lo voy a exponer por una mala decisión de nadie", había explicado la madre en aquella ocasión.
"Pero le hablaré a usted no como Anticomunista que soy, le hablaré como madre que usted debe ser, por tanto y demás creo entienda", definió.
Dijo además que consideraba una "locura" la decisión del "reinicio del curso escolar" y la califica como "nuevamente una mala conducta tomada por los dirigentes".
El sentido común y los hechos le dieron la razón. En provincias como Ciego de Ávila se tuvo que suspender la docencia en aulas para acogerse a la modalidad de teleclases.