Autoridades de salud de Holguín comenzarán a vender en farmacias la “tintura del pseudotallo de plátano”, un sucedáneo del ácido tánico, medicamento en falta por culpa del “bloqueo económico, financiero y comercial de los Estados Unidos”.
Marielis Fernández, especialista de la Dirección Provincial de Salud Pública, precisó a la prensa que el medicamento se utiliza en el tratamiento de las escaras, lesiones frecuentes en adultos mayores postrados y personas con discapacidad.
El producto se venderá en la farmacia externa del Hospital Clínico Quirúrgico Lucía Íñiguez Landín, ubicado en la ciudad cabecera, la cual tributa al servicio provincial de medicina natural y tradicional.
Durante el 2019 en la provincia se produjeron más de siete millones de unidades de compuestos naturales, una alternativa para disminuir los efectos de eso que Radio Angulo calificó como "la política genocida" que restringe la adquisición de materias primas para la producción de medicamentos industriales.
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Al parecer, el bloqueo no sólo vació las farmacias de las provincias orientales, sino también las tiendas y los almacenes. La semana pasada ADN Cuba reportó la invención de una maravilla culinaria para untar panes y galletas: mayonesa de plátano burro.
Ocurrió en el municipio de Tercer Frente (Santiago de Cuba), durante un evento al que le dieron el pomposo título de “Día de la Ciencia”. En la jornada organizada por una sede universitaria municipal se exhibieron otras “maravillas” de la fantasía popular: hornos criollos que funcionan con aserrín, frito de chaya con picadillo y, como si viniera al caso, muchas fotos de Fidel y Raúl Castro.
Otro fruto de la inventiva y la necesidad de los cubanos es el “almendrón agrícola”. El curioso carro azul se dedica a labores del campo como arar la tierra y halar remolques, al más puro estilo de un tractor agrícola, en un lugar de la Isla que hasta el momento no ha sido identificado.
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ADN Cuba reportó otra curiosa situación ilustrativa de los llamados “inventos cubanos”. Se trata de un video subido a redes sociales que muestra el momento en que una pareja de recién casados, a falta de un descapotable, emprende el tradicional paseo matrimonial en el techo de un jeep amarillo.
Asimismo, a mediados de agosto trascendió la noticia de otro invento en el poblado “El Infernal”, en Pinar del Río: una inusual piscina en la parte trasera de un tractor agrícola, creada a fuerza del “ingenio y creatividad” de sus padres, según reportó del periódico local de esa occidental provincia de la Isla.
Una lona impermeable colocada en la carreta del tractor contenía el agua de la “piscina”, que podía moverse entonces por el pueblo mientras los bañistas se refrescaban del intenso calor del verano, sobre todo los niños.
