¿Eres tú, papá?, la primera película de terror psicológico de la cinematografía cubana, fue excluida del Festival de Cine de La Habana que tendrá lugar en diciembre.
La película tuvo el apoyo del gobierno cubano para su rodaje, incluso tras coincidir con la muerte de Fidel Castro. Sin embargo, ha sido excluida sin una explicación convincente del mayor evento cinematográfico que tiene lugar en Cuba.
Dirigida por el holguinero Rudy Riverón Sánchez, residente en Inglaterra, la cinta aborda la enajenación de una familia cubana bajo la influencia de un padre dominante hasta la asfixia, cuya hija desaparece.
La trama de la película funciona como metáfora de la sociedad cubana y del aislamiento en que viven numerosas familias en la Isla, según coinciden varios críticos, al evaluar esta obra que rompe estereotipos cinematográficos.
¿Eres tú, papá? fue filmada de manera independiente en las afueras de La Habana. Las casas de campesinos fueron tomadas como locaciones y su director logró afianzar la atmósfera opresiva que buscaba a partir de la soledad de los paisajes campestres.
El largometraje cuenta con el consagrado director de fotografía Raúl Pérez Ureta y un pequeño elenco de actores encabezado por Eslinda Núñez y Osvaldo Doimeadiós, así como por la actriz Lynn Cruz, quien también ha sufrido la censura en carne propia.
“La exclusión nos tomó por sorpresa. El festival debe abrirse de una vez a cualquier temática sin temor. Ojalá se rectifique y se proyecte este filme porque ganaría el cine cubano, que gracias a películas como esta ha podido ampliar su diapasón en los últimos años”, dijo a ADN CUBA en condición de anonimato una de las funcionarias pertenecientes al comité organizador del evento.
¿Eres tú, papá?, fue exhibida en marzo pasado en el Festival de Cine de Miami y ha sido muy bien recibida por la crítica cinematográfica.
El director de arte de la cinta, Onelio Larralde, no ocultó su sorpresa por la censura, a pesar de contar con un prestigio elenco actoral. “Amigos, sé que muchos nos quedamos esperando ver la dramática fotografía de Raúl Pérez Ureta; lo más triste, al director no le dieron la menor explicación, ojalá esto se pueda rectificar y tengamos una obra más para mostrar en diciembre”, escribió en un post en Facebook.
El director de la cinta había declarado en una entrevista al Nuevo Herald que los ambientes de terror le ayudaron a reflejar el aislamiento y el “miedo real en Cuba”.
“El género de horror me ayudó a justificar el aislamiento en que vive esta familia cubana. Lili y sus parientes están enfocados en sobrevivir. Están aislados y atrapados profundamente en sus propias luchas. El padre de Lili controla la familia y les impone sus valores. Aquí es donde el elemento de horror juega el papel más importante, el miedo real en Cuba, que refleja el estilo de vida cubano”, explicó Riverón Sánchez.