El primer ministro de Cuba, Manuel Marrero, lamentó este viernes la muerte de Luis Alberto Rodríguez López-Calleja, general de División y presidente ejecutivo de Gaesa, el conglomerado militar que controla las actividades económicas más importantes del país.
“Con profundo dolor recibí la noticia del fallecimiento del compañero Luis Alberto, un gran empresario, un gran economista, un gran revolucionario, fiel a Fidel y Raúl”, escribió en Twitter el premier del régimen cubano.
El primer ministro comunista agregó que López-Calleja, con quien trabajó estrechamente cuando Marrero era titular del Turismo entre 2004 y 2019, fue su “hermano”. El dirigente envió su “apoyo a toda la familia” del poderoso general.
El deceso de Rodríguez López-Calleja, anunciado este viernes 1 de julio por la prensa estatal, fue atribuido oficialmente a un “paro cardiorrespiratorio”. El comentarista político Juan Juan Almeida afirma que el general, exyerno de Raúl Castro, padecía un cáncer.
En el momento de su muerte, el militar castrista de 62 años era miembro del Buró Político del Comité Central del PCC, diputado a la Asamblea Nacional del Poder Popular y “asesor” del presidente Miguel Díaz-Canel, según medios oficiales. En los últimos años, con la expansión de Gaesa a todas las ramas de la economía cubana, Rodríguez López-Calleja se convirtió en uno de los hombres más poderosos de Cuba y había sido sancionado por el gobierno de los Estados Unidos.
El general empresario tuvo dos hijos con Deborah Castro, hija de Raúl Castro: Raúl Guillermo Rodríguez, alias “El Cangrejo” y Vilma Rodríguez.
En 1990, Rodríguez López-Calleja prestó servicio en la Contrainteligencia Militar, y participó en la intervención del régimen cubano en la guerra civil de Angola. En 1996 es designado para presidir el Grupo de Administración Empresarial, que agrupa entidades del Turismo y el Comercio Exterior e Interior, entre otras. El holding militar posee desde hoteles hasta las principales tiendas minoristas del país, así como el cambio de divisas en la isla.
El 30 de septiembre de 2020, el gobierno estadounidense incluyó a López-Calleja en la lista de personas bloqueadas por su Departamento del Tesoro (SDN), una sanción que conlleva el congelamiento de los bienes del general que estuvieran bajo jurisdicción del país norteño, si los hubiera, y la prohibición de visado para viajar a Estados Unidos.
Como presidente ejecutivo de Gaesa, López-Calleja controlaba decenas de compañías y sus ramificaciones, y entre el 50 y el 80 por ciento de la recaudación empresarial en Cuba, según estimados de expertos. Su hermano Guillermo Rodríguez López-Calleja maneja un complejo entramado de compañías offshore.
El consorcio militar también posee redes de restaurantes, flotas de vehículos, empresas de componentes electrónicos, importaciones y exportaciones, proveedores, cadenas hoteleras e inmobiliarias.
Entre todos esos negocios, destaca el grupo Gaviota, que maneja los hoteles más rentables de Cuba y cuya facturación deja a Gaesa, según estimados, alrededor de 700 millones de dólares anuales.