Autoridades de la provincia Ciego de Ávila comenzaron la construcción de un nuevo cementerio, ubicado en inmediaciones de la Circunvalación Sur y aledaño al Incinerador de Cadáveres y Restos Óseos.
Según declaró a la Televisión Avileña, Milagros Ruiz Heredia, directora de la Empresa de Diseño e Ingeniería 'DIMARQ', están brindando servicios como proyección y asesoría a pie de obra.
"Estamos adoptando el sistema fast track, que significa que todas las entidades comprometidas en la construcción trabajan al unísono. El reto es decisivo", añadió Ruiz Heredia.
Participan en este proyecto el Contingente El Vaquerito, la Empresa Eléctrica y la Unidad Constructora Militar (UCM).
De acuerdo con el proyectista Hernando Enrique Hernández Prado, a pesar del poco tiempo para concebir la idea, el plan general, los recursos y pedidos a las demás entidades que estarán en la construcción, se hizo el programa de ordenamiento y se siguieron las bases de diseño para este tipo de instalación.
El nuevo camposanto tendrá arquitectura minimalista y albergará hasta 6000 nichos en un primer momento, además de osarios y columbarios.
Se amplían cementerios en otras provincias como Cienfuegos, Mayabeque y Pinar del Río.
Colapso sanitario en Ciego de Ávila
Al cierre de este 23 de agosto, Ciego de Ávila registró 232 casos de COVID-19 y 11 fallecidos, según el parte del Ministerio de Salud (Minsap).
Los contagios han disminuido en la provincia, pero no las muertes ni el colapso hospitalario.
Un reportaje publicado el 10 de agosto en el periódico Invasor confirma que en el hospital "Roberto Rodríguez" del municipio Morón, las personas deben esperar hasta seis horas por un Rayos X; demoran dos días en cambiar una sábana; hay tres guaguas de enfermos; 48 horas de guardia médica y sin relevo; y pacientes esperando un captopril por dos horas.
La falta de oxígeno es una de las problemáticas graves en el hospital de Morón.
Yunier Sánchez explicó a ese medio que su primo falleció por problemas con el oxígeno en la Terapia y "no fue él solo".
Elviro Miranda, ingeniero al frente de electromedicina, dice que se consume un promedio de 2 220 litros diarios. Tiene que enfriar el sistema con agua, activar mecanismos de respaldo para que las averías duren poco, y preparar botellones que alivien la carga.
Hay hacinamiento en la institución médica. El pasado 3 de agosto llegaron tres autobuses llenos de pacientes, a los que no recibían en ningún otro hospital. "El mar de gente empezó a entrar y, cuando salieron a ver, les decían: Y no nos vamos, que no nos quieren en ninguna parte".
A inicios de agosto, Cuba superó el medio millón de contagios de COVID-19 desde la llegada de la pandemia en marzo de 2020, de acuerdo al reporte oficialista.
En redes sociales se difunden a diario denuncias sobre falta de medicamentos, oxígeno y camas para pacientes contagiados.
