Mítines de odio, detenciones y arrestos arbitrarios, son las peores respuestas del gobierno cubano al éxito de la canción contestataria “Patria y Vida”, que en la voz de Yotuel, Descemer, Gente de Zona, Osorbo y El Funky, lleva a millones la denuncia contra el régimen castrista.
El más reciente del que se tienen noticias ocurrió este miércoles 17 de marzo en la provincia de Camagüey. La policía arrestó al activista Bárbaro de Céspedes, por plantarse frente a una sede gubernamental con carteles en los que se leían el lema “Patria y Vida”, así como frases de Martí.
Los propios funcionarios del gobierno se encargaron de detenerlo y hacerlo entrar en el inmueble hasta la llegada de los policías, que se lo llevaron a él y la persona que grababa la protesta. Pero no es la primera vez que sucede.
El opositor cubano Omar Torres Sosa, fue detenido arbitrariamente por la policía del régimen el 21 de febrero, por escribir “Patria y Vida”, junto a otras consignas y frases a favor de la libertad en la fachada de su domicilio. Agentes uniformados se presentaron en su residencia en el municipio Ciro Redondo, en la central provincia de Ciego de Ávila, y el joven se negó a acompañarlos ya que no poseían ninguna citación oficial. Alrededor de una hora después, tres uniformados regresaron a la vivienda y lo amenazaron con una acusación por “desobediencia” si continuaba negándose a ir hasta la estación policial.
“Exijo mi derecho de una orden de detención, no me la están entregando; no obstante, voy a ir porque no les tengo miedo, voy con la verdad. Exigir libertad y derechos no es un delito. Patria y Vida”, expresó el opositor.
“Voy en contra de mi voluntad, pero no les tengo medio”, insistió el joven. “No dejen de apoyarnos que estamos pasando por momentos muy difíciles”, añadió.
En Camagüey, el pasado 27 de febrero la policía arrestó violentamente a tres cubanos en La Plaza de Méndez. Los uniformados arrastraron por el suelo a los detenidos mientras personas concentradas alrededor de las patrullas les reclaman: “¡Abusadores! ¡Abusadores!”.
Según el activista de la Unión Patriótica de Cuba (Unpacu), José Batista Falcón, “el arresto fue en una cola MLC [Moneda Libremente Convertible], y solo porque la gente comenzó a gritar 'PATRIA Y VIDA'”, aludiendo a la popular canción que exige el fin de la dictadura.
Como escarmiento, las autoridades aplicaron a los activistas 1000 pesos de multa por supuestamente “propagar epidemias” y medida cautelar de prohibición de salir del domicilio de cada uno.
A finales de febrero, el líder de Unpacu, José Daniel Ferrer, sufrió una escalada de diversas agresiones luego de escribir el lema contestatario en el frente de la sede de su organización. La represión contra el opositor ha incluido detenciones, agresiones por desconocidos, pintar su hogar para borrar el "Patria y Vida", así como el ataque con piedras y excrementos contra el edificio.
El activista y colaborador de ADN Cuba, Esteban Rodríguez, fue detenido el 3 de marzo por escuchar la música contestataria en la calle.
Al notar que reproducía “Patria y Vida”, agentes de policía interceptaron a Rodríguez en plena vía pública y lo hicieron entrar a una patrulla, justo en los alrededores del barrio San Isidro, donde vive el activista, quien no quitó la canción dentro del auto.
A su vez, se intensificó la represión contra los dos intérpretes del tema que residen en la isla. El 8 de marzo, fue arrestado con violencia el rapero Maykel Castillo, conocido como “Osorbo”.
El director ejecutivo de la división para Las Américas de Human Rights Watch, José Miguel Vivanco, se pronunció en ese momento y exigió a nombre de la organización que el régimen cubano liberase inmediatamente al cantante.
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“Acaban de detener nuevamente al rapero Maykel Osorbo, intérprete de “Patria y vida”. Segunda vez que lo detienen arbitrariamente en 48 horas. Exigimos su liberación inmediata y el cese de estos abusos sistemáticos en contra de artistas y periodistas disidentes”, escribió Vivanco en Twitter.
Por su parte, Eliéxer Márquez, “El Funky”, fue expulsado definitivamente de la Agencia Cubana del Rap, empresa oficial que representa a este tipo de artistas ante otras instituciones. Sin ese aval, los raperos no pueden ser contratados legamente para cantar en el país.
La represión contra quienes asuman la consigna anticastrista, en oposición al “Patria o muerte” –defendida por el oficialismo desde que el extinto dictador Fidel la enarbolara en los años 60 del siglo XX–, no se limita a quienes protesten en los espacios públicos. Fuerzas del régimen han violado domicilios privados tan solo porque sus dueños pintan la frase en la fachada o porque ponen la canción.
Actos de repudio e invasión de domicilios
Uno de los casos más conocidos, fue el de Anyell Valdés Cruz, quien el 22 de febrero fue asediada en su vivienda junto con su familia (entre ella niños), por decenas de personas presuntamente movilizadas por el gobierno, que enarbolaban carteles con el rostro de Fidel Castro y le gritaban ofensas.
La plataforma de activismo feminista Yo Sí te Creo en Cuba denunció que el acoso contra Valdés Cruz, una de las acuarteladas de San Isidro, es violencia de Estado con sesgo de género.
Yo Sí te Creo… emitió una declaración luego de revisar las leyes cubanas vigentes, y concluyó que la agresión es “un caso de violencia política de Estado con sesgo de género, y que afecta además los derechos fundamentales de tres niñes (sic)”.
Señalaron que “esta familia fue víctima de un mitin de repudio (discurso y acto de odio) en el lugar donde vive en Arroyo Naranjo, por una pintada política ['Patria y Vida'] que colocaron en su fachada”.
En el domicilio se encontraban, durante el “acoso con consignas y el allanamiento”, los niños de Anyell, dos de cinco años y uno de 10 años. Luego de arrojar pintura a los sitiados, partidarios del régimen invadieron el portal de la vivienda, adormecieron con una sustancia al perro del hogar, y borraron el “Patria y Vida”, dejando a su vez una pintada de “Patria o Muerte”.
Pocos días después, la ex fiscal y activista por los derechos humanos Yeilis Torres, denunció el lunes 1 de marzo que agentes de la Seguridad del Estado, junto con funcionarios del Partido Comunista, orquestaron un “acto de repudio”, frente a su vivienda en el municipio La Lisa, en La Habana.
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Torres explicó a través de una directa de Facebook, que luego de pintar en la fachada de su residencia “Patria y Vida”, fue citada para un interrogatorio en la estación local de la policía. En su ausencia, según denunció la integrante de Unpacu, amenazaron e intimidaron a su mamá.
“Mi mamá está quitando el cartel de 'Patria y Vida', pero lo voy a poner más grande ahora. No acepto sus amenazas y chantajes”, aseguró Torres durante la grabación, donde quedaron registrados los funcionarios castristas que también la filman, mientras otros partidarios del gobierno gritan consignas.
“Fílmame. Yo digo Patria y Vida y Abajo la dictadura castrista. Han amenazado a mi mamá. Los traidores son ustedes que no creen ni en quienes apoyan su revolución”, gritó indignada Torres.
Osmani Pardo Guerra, uno de los acuartelados en la sede del Movimiento San Isidro en noviembre pasado, fue detenido arbitrariamente el 2 de marzo, luego que agentes de la Seguridad del Estado orquestaran un “acto de repudio” frente a la entrada de su vivienda en La Habana. La razón fue que puso la canción a todo volumen en su domicilio.
También fue arrestado Elier Casares Guerra, primo de Pardo Guerra. El hermano del acuartelado de San Isidro, señaló que algunos de los “simpatizantes” del régimen que participaron en el mitin de odio y agentes castristas invadieron la casa. Según detalló la madre del opositor fue agredida.
“Golpearon a mi mamá, no creyeron en menores ni en nadie. Estaban tranquilos y vinieron con tremenda mala forma, entraron a la casa, tumbaron el equipo [de audio]…”, dijo el joven.
La activista e historiadora de arte, Anamely Ramos, luego de estos hechos, catalogó al régimen cubano en un directa en Facebook como “un estado delincuencial”. Refirió que luego de la detención de Pardo se comunicó con su madre, quien le contó que “la golpearon en el pecho”.
“Eso es allanamiento de morada, lo hacen los delincuentes cuando quieren robar y están dispuestos a maltratar personas. En Cuba lo está haciendo la policía y la Seguridad del Estado, demostrando con creces que abusan de su poder y que tienen impunidad. Esto son CRÍMENES DE ESTADO. Entraron dando golpes, a la mamá de Osmani le dieron un golpe en el pecho y también a vecinos que estaban ahí apoyando. (…) No hay delitos por parte de Osmani. Todos los delitos los está cometiendo el estado y sus fuerzas policiales”, denunció Ramos.