La profunda crisis económica por la que atraviesa Cuba ha afectado cada aspecto de la vida de los cubanos, lo que incluye a los llamados "Consolidados", talleres dedicados principalmente al mantenimiento y reparación de electrodomésticos, donde desde hace varios meses están en falta las piezas de repuesto.
Cuenta de ello da un artículo publicado este 20 de febrero por el periódico oficialista Tribuna de la Habana en su versión digital, pero es algo que ya la población ha venido denunciando, principalmente porque muchos de los electrodomésticos que necesitan ser arreglados son de uso diario, como cocinas y ollas eléctricas, calentadores de agua o ventiladores.
Ante esta problemática la solución del régimen ha sido la de recurrir al "invento", al "cacharreo", como coloquialmente le llaman los cubanos al arte de reparar como mejor se pueda, aunque no se cuente con las piezas y materiales necesarios o idóneos.
Un ejemplo de esto es el consolidado Armada, ubicado en el Casino Deportivo, en el municipio capitalino del Cerro, el cual se mantiene abierto de lunes a sábado a pesar de no contar casi con ningún recurso para continuar brindado servicios.
"El taller de reparación de enseres menores Armada, cuyo contenido de trabajo normalmente abarca los equipos electrodomésticos insertados en el programa de la Revolución Energética, por el momento brinda servicios de reparaciones menores a dichos aparatos, dígase televisores, ollas arroceras, reinas, radios, planchas, cocinas de inducción, entre otros", reconoció en su texto el Tribuna de la Habana.
El mencionado taller apenas cuenta con dos técnicos, que ante la falta de piezas de repuesto y en el marco de la pandemia de la COVID-19, han adoptado como método de trabajo prohibirle a los clientes el acceso al lugar, les recogen los equipos en la puerta y les dan un estimado del tiempo que tardarán en darle solución, plazo en el que podrán regresar para recoger su electrodoméstico.
El propio Tribuna de la Habana reconoce también que los técnicos "actualmente no cuentan con un módulo de piezas de repuesto, por lo que la inventiva es la máxima prioridad hasta que lleguen los tan esperados repuestos". ¿Cuándo ocurrirá eso? Ninguno de ellos lo sabe, pues la crisis ha limitado el acceso del castrismo al mercado internacional, y no hay nada en el horizonte económico del país que avizore que sea pronto.