El guionista y director de cine, Carlos Lechuga, cuestionó a través de su perfil personal en Facebook los abusos policiales, ofensas y cometidos recientemente contra la joven cubana Anamely Ramos por su activismo a favor de la democracia en la Isla.
Su denuncia se centró en la aprobación y encubrimiento de estas violaciones por parte de las principales autoridades del régimen de La Habana.
Lechuga, graduado de la especialidad de dirección en el Instituto Superior de Arte, y posteriormente de guion en la Escuela Internacional de Cine y Televisión de San Antonio de los Baños, compartió una imagen donde aparece el trompetista y director de la orquesta de música popular bailable, Alexander Abreu, y del otro lado la joven historiadora del arte Anamely Ramos.
“En esta foto hay dos artistas cubanos. El fortachón de la izquierda se quejó hace unos meses porque lo ofendían en las redes y al instante tuvo el amparo del Presidente de la República. La fémina (Anamely Ramos) fue agredida, ultrajada, irrespetada en sus más elementales derechos por turbas oficiales en la misma ciudad donde Alexander Abreu repite que a él le dicen: Cuba. Hace falta que el presidente se pronuncia con la misma rapidez que lo hizo en defensa del hombretón. Creo que han pasado muchas horas, ¡Avísenle, por favor!”, escribió el director de los filmes Melaza y de Santa y Andrés, este último censurado en el país por las instituciones oficiales.
La publicación del reconocido creador desató en las redes sociales disímiles reacciones en apoyo a la joven historiadora de arte y en contra del abuso policial en Cuba; así como; los beneficios que son otorgados a los artistas “simpatizantes” con el régimen totalitario.
El usuario de Facebook identificado como Frank Fernández, comentó: “Clase de pena... pudo ser el cambio, el hombre del diálogo, pero no... es un sistema inamovible de vividores que defienden su pedacito de poder...”.
Por su parte, Pedry Roxana Rojo agregó: “Bello e ingenuo reclamo. Ella es libre. El esclavo”.
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Así opera el régimen castrista. Pero Anamely Ramos González se salva a pesar de tanta podredumbre estatal. Ella cree en el arte y sus amigos, en “construir un país mejor”.
Anamely ha aparecido en los últimos días en varios videos compartidos en redes sociales, donde se observa cómo es agredida por agentes de la policía; mientras un grupo de personas orquestadas por el régimen la enfrentan.
La activista por los derechos humanos, narró las jornadas de pesadilla totalitaria que vivió: la sometieron a amenazas y violencias de todo tipo durante varias detenciones y un arbitrario interrogatorio de la policía política, donde le aseguraron que ellos son “los dueños de la revolución y los dueños de la libertad de opinión”.
