Una nueva forma de interacción social, didáctica y divertida, llega a la isla caribeña para poner a volar la imaginación de adolescentes y jóvenes.
Si eres fiel seguidor de Game of Thrones, Harry Potter, Naruto o cualquier otra saga o serie fantástica, ya puedes estar contento, porque llegaron a Cuba los grupos de roles en WhatsApp, donde se encarnan los personajes, decidiendo sus parlamentos y hasta la trama que hará posible tu propia historia.
Según el grupo pionero de rol Nauramino esta práctica consiste en "un sistema de diversión didáctico donde cada persona escoge un personaje del anime planteado para aprender a rolearlo, lo que significa representar a ese personaje escogido con fin de hacer una historia propia en lo cual puedes hacer que tu personaje tenga relación con otros, o hacer una historia paralela o alterna a la historia original".
En Cuba apenas lleva un año haciéndose. Para saber cómo rolean los cubanos, contactamos con un grupo de rol de la serie Juego de Tronos y aquí está su testimonio.
¿Cómo surge la idea?
"No estoy muy segura de eso, no soy de las primeras fundadoras de estos mundos. Pero viene tras la emisión de la serie Juego de Tronos. La idea era llevar como tal la trama a esta esfera virtual y que las personas pudieran encarnar sus “casas” favoritas con tal de ganar el trono de hierro. No era necesario como tal decir soy tal personaje (aunque muchos que se identifican con algunos lo hacen) sino de revivir el juego en sí, pudiendo llegar a ser el rey si sabes cómo jugar tus cartas", comenta Yanitza.
"Este mundo se creó a partir de un grupo de personas que se unieron para crear esta comunidad y hacerla crecer, estas personas son las que le dieron forma al juego inicial y a partir de ese se ha ido mejorando con el paso de los años. Ellos como dije al inicio querían su propio mundo, su reino, su historia, querían vivir la vida que George R. R. Martin plasmó en sus libros", explica Daniela a nuestra revista ADN Cuba.
Hoy día se desconoce la cifra exacta de personas en el mundo que rolean, incluso son muchísimos los grupos y variadas las temáticas. En la red de redes existen disponibles miles de estos mundos, tanto en habla hispana como en inglesa, que recrean los universos de El señor de los anillos, World of Warcraft, Los juegos del hambre, por citar los más conocidos, entre otros.
"Actualmente hay de 180 a 200 personas, la verdad es que ahora estamos haciendo el censo, no lo sé con exactitud. Tengo entendido que el mayor mundo de GoT que existe es de un usuario de España muy parecido al nuestro y la verdad es que nuestro grupo no es el único mundo de GoT en Cuba, existen muchos más pero todos parten de la misma idea", aclara Daniela.
"No podría decirte un número específico, pero los hay de todos tipos, de todas las edades, de todas las razas y de todos los países. Algo sobre esto de lo que he podido darme cuenta es que la inmensa mayoría son personas preparadas e intelectuales", dice Yanitza.
Este juego de roles es básicamente igual que un videojuego, solo que la interfaz es un chat al ser un simulador social. El juego cuenta con las mismas ciudades y reinos existentes en la serie y los libros, cuenta con reglas y leyes como si fuera un reino. La historia la crea el propio jugador, él decide si quiere ser un rey o un asesino, todo puede pasar siempre que esté dentro del contexto de la saga. "Tal cual en la saga, existe la guerra que se lleva a cabo de forma estratégica como si fuera un ajedrez. Hay alianzas, traiciones, bodas… en fin, todo lo que te puedas imaginar de una vida medieval en un mundo semi-fantástico", nos comenta Daniela.
Lo que comenzó como una forma virtual de socialización, pronto permutó a los espacios físicos. Así fueron los primeros encuentros antes del COVID-19, según Roxy, otra de las participantes:
"Cuando planeamos un encuentro, normalmente no es con los que llevan poco tiempo en el juego, la mayoría de los encuentros es con integrantes que llevamos casi un año de conocernos, tenemos confianza y solo faltaba la parte física. Desde el primer encuentro todos nos tratamos como familia o como si nos conociéramos de toda la vida. A veces íbamos a tomar helado, o al parque Lennin. Nos conocíamos, contábamos chistes y cosas del rol o del juego. Tenemos la serie en común y los debates y conversaciones nunca faltan. La verdad, la primera vez todos estábamos con el móvil en mano conectados y en el rol aunque estuviéramos juntos en el mismo lugar. Luego relajamos tensiones y ahora muchos somos una familia".
Durante la cuarentena, los grupos de rol debido a la situación se han hecho muy populares. Los roleadores sienten que este juego es un alivio y una manera de mantenerse unidos en el aislamiento.
"En estos momentos en que el ocio y la ansiedad está acabando con uno, es lo principal. Mantiene tu mente funcionando a mil y te mantiene ocupado, también ha despertado el lado creativo de todos, haciendo crónicas (relatos en rol donde narras las vivencias de tus personajes) o simplemente escribiendo lo que sientes, poesía, historia. Para algunos estar aquí les ha ayudado y todos esperamos que esta cuarentena pase para vernos otra vez cara a cara. Ya nos extrañamos", dice con añoranza Yanitza.
"Yo soy bastante nueva, apenas entré cuando comenzaba la cuarentena y me ha ayudado mucho a pasar el tiempo, la depresión de estar y sentirme sola en casa ha disminuido hablando y compartiendo. En estos momentos que uno está lejos, que no se puede ver a quien quieres, no puedes abrazar, besar, salir, las redes sociales son muy importantes para comunicarnos y sentir que estamos informados, que estamos en contacto con el mundo", confiesa Daniela.
Pero como todo exceso es peligroso, hay que saber dosificarlo para evitar dependencia tecnológica, una enfermedad que está golpeando más que nunca la psiquis de las personas.
"La emoción es tan palpable que si no te mides puedes llegar a obsesionarte. Y todo extremo es malo. Me gustaría decir que no pasa, pero sería mentir. A veces se olvida que esto es simplemente un juego y llegas a coger mucha lucha, estrés, y llegas a olvidarte de que existe algo más que Got. Siempre he dicho que en el momento en que el juego interfiera de alguna forma perjudicial tu vida, en ese momento hay que hacer un pare", reflexiona Yanitza.
"Quizás algunos digan que perdemos el tiempo, que esto no es de utilidad, pero nosotros que llevamos tiempo aquí hemos visto más allá, hemos sentido, reído, llorado, hemos ayudado, hemos conocido, porque cada uno de los que está aquí tiene una historia que contar, hemos llegado a ser una familia para ayudarnos mutuamente", asegura Daniela.