El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, volvió a recordar la falta de democracia que persiste en Cuba hace más de 60 años y la posición de los países latinoamericanos frente a ello.
El uruguayo dio estas declaraciones durante la presentación del libro "El modelo iliberal cubano y su influencia en América Latina", coordinado por DemoAmlat.
La charla también contó con la presencia de actores de la sociedad civil cubana como la periodista de 14ymedio, Luz Escobar; el fundador de Yucabyte, Norges Rodríguez; uno de los autores del texto, el politólogo, Armando Chaguaceda; el abogado, Eloy Viera; entre otros.
Además participaron otras personalidades como Miriam Kornblith, directora Senior del Programa de América Latina y del Caribe de NED; y Leandro Querido, director de DemoAmlat.
"El caso cubano es muy particular; es una dictadura que su éxito es haber permanecido en el poder todo este tiempo. Para mí eso es un fracaso. En eso se ha agotado varias veces. El caso cubano es extremo y aplican fórmulas que no funcionan en ninguna parte", explicó Almagro.
Asimismo citó modelos que fueron parecidos, como Vietnam y China, y que si bien aun conservan rasgos autoritarios, al menos en lo económico han tenido que modificarse.
También habló el jerarca de la OEA sobre lo que llama "apaciguamiento frente a las dictaduras, buscando apaciguarlas", por parte de otros países de la región.
Para él, estos mecanismos diplomáticos no han tenido el efecto esperado.
"Nos hemos puesto blandos frente a ellas. Debemos seguir bregando por insertar valores democráticos en el sistema cubano y la sociedad cubana, y generar anticuerpos en otros países donde se están erosionando los valores democráticos".
Realizó fuertes críticas a los derechos electorales de la isla. "Han sido desactivados. Se ha eliminado cualquier variable de participación política salvo la auto convocada por la dictadura", añadió.
Las voces cubanas
Escobar señaló que la aparición, aunque cara y limitada, del internet en Cuba, ha ayudado a ofrecer un relato alternativo de Cuba, en contraposición al que históricamente dio el régimen de La Habana.
La reportera expresó que "se siente una privilegiada por las tecnologías en los últimos dos años; para hablar con las fuentes, tener inmediatez. Estamos más cerca de las personas".
Por su parte, Viera se refirió al uso de la justicia contra la disidencia en el espacio cubano.
Asimismo, Rodríguez recalcó que "la dictadura cubana demoró durante mucho tiempo el acceso a internet. Se dieron cuenta de que tener un país sin internet en esta época, significaba como estar sin electricidad en los años 70".
De acuerdo con el ingeniero, la prensa independiente ha jugado un papel esencial en estos cambios sociales, y ahora se les lee más dentro del país.
"La dictadura asumió que tenía que informatizar el país, y no ha logrado controlarlo".