La pandemia de coronavirus se cobró la vida de toda una familia procedente de Nicaragua, que vivía en Florida, Estados Unidos. Un matrimonio y su hijo mayor, residentes en Miami, murieron al perder la batalla de sobrevivir a la COVID-19.
Madre, padre e hijo, vivían en un hogar en una casa donde permanece la única sobreviviente de la familia, que sigue en cuarentena porque también dio positivo al nuevo virus SARS-CoV-2. Se trata de otra hija del matrimonio Mayorga Tapia, Violeta, que tuvo que ver desde el aislamiento cómo desaparecía su familia.
“Está devastada no es fácil perder a su mamá, su papá y a quien tenía muchas esperanzas, su hermano”, dice Francisco Quiñonez, un primo de la familia quien es pastor en una iglesia.
Mario Mayorga Tapia Jr., antiguo alumno de la Universidad Barry de Florida, falleció este domingo en el hospital Mount Sinai. Trabajaba para una empresa que ofrecía servicios de limpieza en un hospital de Miami Beach.
Su mejor amiga, Lourdes Pérez, indica que con Mario se intentó incluso curarlo mediante tratamientos con plasma de pacientes que se recuperaron de la COVID-19, pero todo fue en vano.
Familiares dicen que Mario, el hermano mayor, de 42 años, comenzó a sentirse mal a mediados de marzo. Aunque no están seguros dónde fue que se contagió con el virus, creen que él lo pasó a sus padres y hermana con quienes vivía.
“Mario era una persona excelente llena de amor, de vida, todavía joven, le encantaba salir, viajar, pasar tiempo con amigos y familia”, dice su prima Marcela Lastre.
La familia llegó de Nicaragua en la década de los 80. Mario y su hermana Violeta se criaron en Miami, según trascendió en los medios locales.
El padre, Mario Mayorga Tuckler falleció el 10 de abril. Días después murió su esposa, Esperanza tapia. Este matrimonio había celebrado los 50 años de casados, en el condado de Miami-Dade donde vivían. Ambos fueron maestros en Masaya, Nicaragua.
Marcela, la prima del joven Mayorga, creó una cuenta de GoFundMe para ayudar a cubrir el costo de los funerales. “Pedir apoyo nunca es fácil, pero este es un momento para que todos se unan y ayuden a una familia muy querida”, escribió.
“Por favor, done para funerales y gastos médicos acumulados durante estas últimas 6 semanas”, agrega la familiar.
“Cuando se enfermaron, todos nos asustamos mucho, pero nunca esperábamos este resultado”, dijo Lastre a Local 10.
Ahora, Violeta Mayorga Tapia sigue combatiendo contra el coronavirus, y espera superarlo para reunirse con su hijo de 8 años que por ahora se mantiene apartado de ella, con su padre.
“No es una broma, es una enfermedad que mata, puede entrar en cualquier momento a tu casa, a tu vida, y de un día a otro perder a todos tus seres queridos”, dijo Violeta a Univision.
Ella y sus padres de más de 70 años fueron hospitalizados en el Hospital Kendall Regional. Violeta dice que ella y los amigos de su hermano creían que se recuperaría, y por esto todavía no había enterrado a su padre y a su madre, esperando que Mario Mayorga Jr. pudiera al menos darles el último adiós.
Violeta asegura que ha sentido discriminación por haberse contagiado, y le parece algo injusto, pues el coronavirus le puede a dar a cualquier persona. “No se lo deseo a nadie”, concluye y también pide ayuda a la comunidad para pagar los gastos de cremación de sus seres queridos.
Si quiere contribuir, entre aquí a GoFundMe.