Doce cubanos fueron detenidos este 8 de septiembre en el extremo sur de Florida, tras su llegada a Cayo Hueso a bordo de una embarcación rústica, informó Thomas G. Martin, jefe de la Guardia Costera de EE. UU.
En la operación, que tuvo lugar de madrugada, intervinieron guardacostas y “socios locales”, según un mensaje publicado en Twitter junto a una fotografía de la balsa, hecha con una estructura metálica y lonas.
Todos los migrantes interceptados “reciben comida, agua, refugio y atención médica básica” una vez interceptados en alta mar o tierra firme, de acuerdo con los protocolos estandarizados de la institución.
Los 12 fueron puestos bajo la custodia de la Patrulla Fronteriza. La Guardia Costera no ofreció detalles sobre la identidad de las personas.
Desde el 1 de octubre de 2020 hasta la semana pasada, la Guardia Costera ha interceptado a 729 cubanos que trataron de entrar al país por mar.
Solo el pasado sábado fueron repatriados 35 cubanos que habían sido interceptados frente a las costas de Cayo Hueso la semana anterior.
Si estos “balseros” no convencen a las autoridades migratorias de que tienen motivos creíbles para temer el regreso a la isla, serán repatriados.
A finales de agosto se vivió un momento tenso entre la Guardia Costera y el Ministerio del Interior del régimen cubano, por no devolver a dos balseros a la Isla, que apelaron a la categoría del “miedo creíble” y continúan en manos de las autoridades estadounidenses.
Tras la derogación de la normativa Pies secos-Pies mojados en enero de 2017 por el entonces presidente Barack Obama, la migración por mar desde Cuba disminuyó, sin embargo, en 2021 ha aumentado en un 80 por ciento, reveló el capitán Adam Chamie, comandante del sector de la Guardia Costera en Cayo Hueso.
