El sureño estado estadounidense de Florida registró este 13 de septiembre, por segundo día consecutivo, su tasa de positividad al COVID-19 más baja en tres meses: 4,26 por ciento, luego de que las autoridades sanitarias informasen de 2 423 nuevos positivos a la enfermedad pandémica, diagnosticados a partir del procesamiento de 62 318 pruebas.
Con el nuevo incremento de contagios y los ocho fallecimientos registrados como consecuencia de complicaciones derivadas de la enfermedad, los totales acumulados desde el inicio de la pandemia en el estado del sol se sitúan en 663 994 y 12 764, respectivamente.
Asimismo, los casos reportados en la última jornada sitúan el promedio de positivos diarios en la semana que termina en 2 509, bastante alejado de las cifras de cinco dígitos que se registraron en los peores días de la contingencia en el estado, cuando se llegó a temer hasta un eventual colapso hospitalario.
A nivel de condados, Miami-Dade y Broward siguen siendo los de mayor número de contagios. El primero tiene ahora 164 086 casos y el segundo 74 434. Entre los dos concentran cerca del 36 por ciento de todos los floridanos que han padecido o padecen COVID-19.
Palm Beach acumula hasta el momento 44 025 casos de coronavirus y Monroe, el condado al que pertenecen los cayos, 1 780, para hacer del sur de la Florida la región más impactada por la pandemia en el estado.
En el centro del mismo, el condado Hillsborough tiene hasta el momento 39 450 casos acumulados de la enfermedad pandémica y Orange 37 939, mientras que en el suroeste el condado Lee registra 19 488 positivos y Collier 12 209.