El opositor cubano Eliecer Ávila manifestó recientemente su disposición a debatir con su compatriota Edmundo García, siempre y cuando el debate cumpla con dos condiciones de difícil realización: que sea en Cuba y transmitido en vivo para todo el país.
En un post de su perfil de Facebook, Ávila, fundador del partido político Somos Más, escribió:
“He decidido aceptar el reto a DEBATE de Edmundo García. Sólo pongo dos condiciones:
1 - El debate debe ser en Cuba para que Edmundo se sienta más cómodo, y para que su efecto valga la pena de verdad.
2 -El debate debe ser en los estudios de CubaVisión y transmitido en cadena nacional en vivo y en directo.
Considero que Edmundo puede hablar con su jefe Diaz Canel (dice que es el asesor) y que éste le conceda el deseo.
A la espera de invitación formal.
E.”
De esta forma, el joven activista responde al “reto” de Edmundo García, periodista cubano residente en Miami que continuamente defiende al régimen de La Habana y está en contra de las posturas y opiniones tradicionales del exilio cubano en Estados Unidos.
Por su activismo en “tierra de libertad” en favor de la dictadura antillana, García se ha ganado el rechazo de muchos cubanos que desean un cambio en la isla. Al desafiar a Ávila a debatir, confiando en su capacidad para hilvanar argumentos y conducirse correctamente ante las cámaras, el expresentador del popular programa televisivo cubano “De la gran escena” no previó quizás que el tunero aceptaría la propuesta como lo hizo.
Accede, sí, pero siempre y cuando García, acusado por muchos de ser agente de la inteligencia cubana, mueva sus influencias y garantice que el eventual debate sea visto libremente por todos los cubanos.
“Una maravillosa idea, un buen propósito, pero de antemano sabemos que todo quedará ahí”, escribió acertadamente en el post de Ávila el usuario Mel Vázquez. Como a él, a muchos otros internautas le encantó la idea, pero la mayoría coinciden en que a García no le será posible cumplir con las condiciones, dado que pocos, salvó él y unos más, aparentemente, desconocen el férreo control partidista que hay en Cuba sobre los medios de comunicación.
Así, más de uno quedará con las ganas de ver debatir a Eliecer Ávila, quien puso a titubear al otrora presidente de la Asamblea Nacional Ricardo Alarcón, con Edmundo García, el ferviente militante y defensor de La Habana en Miami.